Capítulo 22

1.4K 174 98
                                    

—Ah... Esa nube se parece a un conejo... —dije con desgano.

Me había puesto a encontrarle forma a las nubes porque me estaba muriendo del aburrimiento.

Al principio me parecía interesante pero poco a poco fue perdiendo lo divertido.

Era eso o quedarme acostada viendo al techo con la mente en blanco.

De alguna forma desperté de regreso en mi habitación y al no poder salir me estaba quedando sin cosas que poder hacer en este espacio. Yo no era de las personas que se pueden quedar quietas por horas, yo necesitaba moverme, estar haciendo algo y estar aquí adentro ociosa me estaba desesperando.

Lo peor era que no podía salir de aquí. Y no quería tampoco ahondar en los pensamientos que rondaban en mi cabeza, los cuales cabe recalcar que no eran pocos. Creo que incluso podría aplicar la analogía con un mar, vasto y enorme.

Pero supongo que en algún momento iba a tener que pensar en ello, ¿cierto?

Es sólo que, eran tantas cosas que me confundía y no sabía qué era qué cosa. No tener ni la más pálida idea de lo que estaba sucediendo me estaba frustrando. Especialmente porque ya había accedido a ayudar al chico. Sin embargo, en todo el día no me había llamado para practicar y eso me preocupó un poco. Es decir, todos los días, sin falta, a las doce en punto, siempre llegaba un guardia a decirme que el príncipe me esperaba en el salón del último piso donde había estado practicando para mejorar mis poderes.

Incluso ya estaba atardeciendo y no había señales de que fuera a aparecer.

Me parecía extraño que no me hubiese llamado porque era lógico que, habiendo accedido por fin, quisiera que practicara aún más.

¿Estaría avergonzado de que lo hubiera visto en aquel estado?

No me sorprendería, siendo su personalidad como es.

Pero no le encontraba nada malo. Somos seres humanos y tenemos debilidades. Es algo normal, pero sucede que me doy cuenta de una de las suyas, aunque no sepa exactamente qué era, y ahora no quiere que lo vea por la misma razón. Estaba quizá un noventa por ciento segura de aquello.

—Nope, no puedo soportar mas el encierro. Debo hallar una forma de salir—dije para mi misma.

Por la puerta es seguro que no, el guardia no me dejaría dar ni cinco pasos fuera.

Entonces se me ocurrió una idea.

Precisamente ayer, aunque me había desmayado, había logrado levitar al utilizar parte del máximo de mi potencial mientras practicábamos.

Bien, ¿por qué no?

Iba a intentar volver a levitar.

La furia había potenciado mis poderes, pero como dijo Sunghoon, aunque odie admitir que tenía razón, no podía limitarme a utilizar mis poderes únicamente en base a mis emociones. Yo misma tenía que ser capaz de controlarlos.

Lo había logrado en el bosque, sólo debía de replicar lo que hice en es momento, pensar únicamente en la sensación del fuego, las chispas, el calor, mi conexión con las llamas.

Cerré los ojos y pensé en la lumbre y enfoqué mi mente en todas las veces que había tenido contacto con fuego, no que yo lo hubiera producido, sino simplemente sentido.

Entonces una luz se iluminó en mi mente.

¡Eso era!

No tenía que enfocarme en producir el fuego, sino en sentirlo y estaba funcionando.

Podía sentir mis manos calientes y al abrir los ojos confirmé que estaban en llamas.

Los mechones anaranjados flotando mostraban que mi cabello también.

ICE PRINCE [ENHYPEN - Sunghoon - FANFIC]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora