Insoportable - Capítulo 29

7.1K 696 812
                                    

Abrazaba fuertemente al líder mientras mi llanto desconsolado continuaba, sentía que no podría continuar y no sabía a donde correr, siempre pasaba algo malo a mi alrededor.
Si continuaba viviendo en el culto, seguramente más problemas vendrían al igual si me iba de este.
Sentía que me rompía, que me caía a pedazos.

- Y-Ya no puedo soportarlo señor... -

Murmuré mientras escondía mi mirada en él, no quería que me viera en un momento donde me sentía tan vulnerable y humillada pero mi cuerpo junto con mi mente me dolían tanto que no podía contenerme.
Él únicamente acariciaba mi cabeza con delicadeza, al levantar la vista, noté que su mirada era gélida e inexpresiva.
Era frustrante no saber en lo que estaba pensando.

- ¿Q-Qué estas diciend- -

- ¡Me quiero ir de aquí! ¡No quiero seguir aquí! Comienzo a creer que estaba mejor en la calle tratando de sobrevivir... Tengo miedo todo el tiempo, o alguien me tienda una trampa o que abusen de mi. En la calle solo me golpeaban y ya- -

Grité tratando de que no se me quebrara la voz lo cual no pude lograr, continué entre murmullos apenas audibles.

- N-No quiero desaparecer yo o mi hermano... No quiero tener el mismo destino que Samiku y Kotoha. ¡N-Ni siquiera tengo una pista de dónde está! Tengo miedo, miedo que desaparezca y nadie me encuentre. -

Noté un brillo de sorpresa consternada en él acompañada de una mirada sombría, me di cuenta que su abrazo aumentaba de fuerza a la vez que bajaba la cabeza para después acariciar mi espalda.

¿Q-Qué pasa?

Pensé preocupada al ver que no se movía, estaba por empujarlo hasta que tomó mi cara y me dió un beso.
Este era diferente a los habituales, era mucho más cálido y gentil.
Después de unos segundos nos separamos y me murmulló dulcemente.

- Perdóname por dejarte pasar tantos horrores, incluso yo te eh hecho daño... -

Tuve una impresión diferente, esta vez no había ningún rastro amenazante o terrorífico.
Estuvo a punto de darme otro beso hasta que el fusuma que se encontraba a un costado se abrió repentinamente demostrando que era el señor Makeoto preocupado por el líder, al contemplar la escena, solo nos miró extrañado. Un hormigueo helado recorrió mi cuerpo poniéndome nerviosa al instante.

- S-Señor Douma-  -

Tartamudeaba el jefe del personal al contemplar la escena sorprendido, después de unos segundos el líder habló duramente para que continuara.

- ¿Qué sucede? -

- Oh, bueno... Al ver que usted desapareció repentinamente todos se estaban preguntando donde estaba y solicitando una audiencia, incluso las oiran invitadas. -

- Ya no estaré disponible el resto de la noche, continúen con la fiesta. -

- ¿¡E-Eh?! -

Tanto como el señor Makeoto y yo estábamos sorprendidos por tal decisión.
El líder lo miró seriamente esperando a que acatara las órdenes, este rápidamente hizo una reverencia mientras se alejaba y cerró el fusuma.

Aún estando en sus brazos, se puso de pie y se comenzó a dirigir al jardín, no sabía a donde nos dirigíamos pues íbamos directo a la cerca de bambú que bordeaba la zona al extremo más alejado del lago.

𝐿𝑜𝑡𝑜 𝑑𝑒 𝐻𝑖𝑒𝑙𝑜Donde viven las historias. Descúbrelo ahora