Capítulo tres

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Dash

No sé por qué le pedí perdón a ____ por una broma. Nunca suelo hacerlo, a menos que sepa seguro que herí a la persona, pero lo hice. Yo sabía que ella tenía en claro que era una broma y que no se había molestado.

En realidad, sí lo sé.

Me gusta ____. Demasiado.

Ya eran las 4:55 de la tarde y estaba de camino a casa de ____ a recojerla. Ya estaba doblando la esquina de su calle y yo seguía dandole vueltas al tema.

Me paré en frente de su casa y me bajé del coche a ir a tocar su puerta.

EStaba a punto de golpear la puerta cuanado lo escuché: ella estaba cantando, creo que un poco motivada, pero era precioso. Su voz era suave y no desafinaba ni una nota.

Fue entonces cuando me di cuenta que se había dejado las llaves pegadas en la cerradura. Entré desapcio, con cuidado de que no se diera cuenta. Paladino estaba en el salón, agarrando el mando a distancia del televisor como microfono, con el videoclip de Black to Black de Amy Winehouse reproduciéndose en la pantalla delante de ella. Lo único que nos separaba era una delgada pared con un ventanal sin cristal que dejaba a la vista la sala.

Al acabar la canción comencé a aplaudirle por el gran espectáculo, lo que a ella le espantó, pues creía que estaba sola en el edificio. Dió un pequeño salto por el susto y giró sobre su eje para ver de quién procedía ese aplauso.

-Cantas demasiado bien, Paladino. Me has sorprendido.- Le dije y ella abrió aún más los ojos en sorpresa.

-¿Qué haces aquí?- preguntó.

-Te vine a recojer para hacer el tabajo juntos, pero antes de tocar la puerta choco tu preciosa voz con mis tímpanos y, al ver que te habías dejado las llaves den la cerradura, decidí entrar- le respondí y ____ se sonrojó ligeramente. -Venga, agarra tus cosas y nos vamos.-

La chica asintió y cojió una mochila que llacía en un sillón. Le costó un poco llevársela al hombro, por lo que suspuse que estaba pesada. Cuando pasó a mi lado, en el pasillo dirección de la puerta, tiré de la mochila para llevarla yo y me sorprendió lo que pesaba.

-¿Qué llevas aquí?, ¿piedras?-

-Son libros de la biblioteca que hablan sobre Grecia y el arte antiguo- me respondió rodando los ojos. -Y no hace falta que me la lleves, tengo manos- añadió sarcástica.

-Claro que tienes manos, pero yo tengo modales como buen caballero que soy.- le dije en tono de burla. La pelinegra rió negando con la cabeza, dirigiéndose a la puerta a unos pasos de ella, la abrió y me dejo pasar primero. -¿Y sabes? Existe algo que se llama Google, donde está todo lo que en estos libros hay y no pesa tanto.-

-Ay, calla, ya lo sé. Pero, ¿Ves?, yo también tengo modales.- esta vez era ella la que se burlaba y yo me reí, dejando en los asientos traseros del auto la pesada mochila.

Fui a sentarme en el asiento del conductor y ella ya estaba sentada al lado mío.

~

____ PALADINO

Joder, que vergüenza. No podía parar de repetir eso en mi cabeza.

Él me había escuchado cantar desprevenidamente.

Que desastre de vida.

-____, antes te dejaste el MP3 aquí- dijo sacándome del trance en el que estaba.

Oh mierda, soy demasiado despistada.

-Cierto, disculpa-

-Pon otra vez música, he de decir que tenemos gustos musicales demasiado parecidos- añadió.

Pulse el botón de reproducir y se escuchó la canción por todo el coche.

Igual que antes, no hablamos durante el trayecto, solo disfrutábamos de la música que sonaba.

Fuimos por una carretera, la cual nunca había ido, hasta llegar casi a un muro. Abrí los ojos como platos al ver que Dash iba directo al muro, sin preocuparse que chocaríamos.

Dios mío, este chico es suicida.

-¿!QUÉ HACES!?- le pregunté a gritos.

-Tranquilizate un poco, mira- añadió calmado y aceleró.

Cuando estábamos a apenas centímetros de ese muro, se abrió, dando paso a un garaje enorme.

¿Qué mierda es esto?

...............

¿Desde cuándo la historia tiene 22 leídas? AY, KEMOSION :D.
Gracias, en serio <3.
Y sorry por no actualizar hace 173829 años, pero yo avisé que hacía actualizaciones lentas xd.

Nada es para siempre, excepto lo nuestro// Dashiell Robert Parr y ____ PaladinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora