Charla emocional

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KHEA_Tu msj.
_Muy adentro de mi mente, tu corazón está hundido_

ESTE CAPÍTULO FUE LO QUE SUCEDIÓ CUANDO JESSE Y WACHO ENTRARON.

~Narración~

Jesse y Wacho entraron a la casa cerrando la puerta continuamente.

—Un montón de años contigo y sigues siendo el mismo ordenadito de siempre—Soltó Jesse haciendo el entre comillas con los dedos—. Mira esta casa, pareces viuda con más de cincuenta gatos—Sonrió.

—Quisieras algún día que tu cuarto fuera como mi casa. ¿Acaso a tu novia no le molesta el reguero?

—Para nada mi rey, ella es peor que yo.

—¿Beer?—Preguntó ofreciéndole una botella de cerveza.

—Na, gracias.

—¡Espera, espera, espera! ¡¿Jesse Javier Martínez me rechazó una cerveza?! No puede ser, esto hay que celebrarlo—Gritaba eufórico.

—¡Jaja tranqui bro! Es mi chica, que no le gusta que beba.

—Me imagino que ya montaste alguna escenita de las tuyas allá, espera no me digas ¿Intentastes ahorcarte o el clásico corte de venas?—Sonreía sin parar.

—Cualquiera que te escuchó pensara que fuimos novios o algo antes.

—El amor beibi, el amor.

—Bueno entonces dime ¿Qué carajos pasa aquí?

El rostro de felicidad de Wacho cambió completamente a nerviosismo y seriedad.

—Las cosas están cambiando bro, esta mierda se nos está iendo de las manos.

—Sí, yo sé, pero sabes que estoy aquí.

—Sí, ya te veo, pero no estás aquí por nosotros ¿Qué sucedió en Estados Unidos para que volvieran tan rápido?

Jesse le explicó todo lo de Jane.

—Che, que pro.

—Sip, pero eso no importa ahora ¿Cuéntame cómo está el taller?

—De eso te quería hablar, Salazar está pidiendo más mercancía de la que tenemos, hace meses que nuestros envíos y recibos están fallando.

—¿Y cómo pasó eso?—Preguntó Jesse sereno pero ya se le notaba la inquietud en sus manos.

—Remi, mataron al primo de Remi.

Jesse no se sorprendió, simplemente arrugó las cejas intentando entender la situación.

—Wacho ¿Y qué cojones hacia el primo de Remi aquí, de dónde sacaron a ese pibe?

—A ver te explico—Jesse le hizo un gesto con la mano para que continuara con la explicación, sacando un cigarrillo de su cajita.

—Semanas después de que te fuiste comenzaron las anuales y como siempre, los chicos apostaron, pero ofertaron más de lo que podían dar por Willy, sabes que es de los mejores corredores que tenemos y los pibes se confiaron. Ganamos las tres primeras rondas, pero cuando le tocó a Willy la moto sufrió deficiencias y no pudo arrancar. Cuando la revisamos tenía un salidero de combustible, alguien le hizo algo a la moto antes de la carrera.

—Y ahí comenzaron los problemas—Dijo Jesse dándole una calada a su cigarro.

—Exacto, al no tener dinero para pagar nos fuimos estancando.

Miley AshleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora