Nathan Evans_Wellerman (remix)
_Pronto puede venir el Wellerman, para traernos azúcar y té y ron_~Narra Miley~
Martes en la mañana, me despierto y al igual que ayer, mi novio no está a mi lado. Jesse comenzó a ir al tratamiento de mamá junto a Mario, era todos los días entre semana.
Tampoco hemos tenido sexo, los primeros días nos quedábamos juntos cuidando a Jane en las noches. Pero como tiene turno en la mañana, no se puede quedar a cuidarla, porque sino estaría muy agotado al día siguiente.
Con respecto a Samy, nos hemos topado varias veces por el pasillo, ella por la vergüenza baja la cabeza cada vez que me ve venir evitando el contacto y yo odiándola cada día más aunque se ve que no es pesada.
Como no tenía nada que hacer y Jesse no llegaba hasta el medio día, me fui para el cuarto de niños a jugar, no con la play, sino con los peluches, era el momento del día que todos estaban ocupados y tenía que aprovechar.
Cerré la habitación con llave por si acaso venía alguien y me veía en esas condiciones. Encendí la TV y puse toda las películas de Sherk, me encantaba desde niña ese ogro tierno que ocultaba sus sentimientos.
Y ahí me mantuve toda la mañana, creando historias e iluciones con mis juguetes y mi castillo imaginario, pero siempre hay un villano que lo jode todo.
La puerta se abrió de repente y salté eufórica para el sofá, acostándome tratando de esconderme.
"Tú, yo, el barco de mi cuñao', una jarra de sangría bien fresquesita y do' semanita' sin hace' otra cosa que... pesca'
¡Gato, cállate, joder!
Jesse apagó el televisor y escuché su sonrisa baja de burla.
—¿Gato te delató, eh nena?—Sonrió.
¡Hijo de...!
Saqué la cabeza por encima del mueble, lo miré a los ojos y estaba con los brazos cruzados mirándome frunciendo las cejas.
Traté de pararme apoyando los brazos en el sofá pero me resbalé y estampé mi rostro en el mueble.Las carcajadas de mi novio dislocaron mi mente, el muy sanaco se está riendo en mi cara. Me levanté, me senté y me paré.
Caída, pero nunca destruida, bebé.
Me puse de frente a él y lo encaré como Sansa Stark de Juego de Tronos, pero caí como su sumisa al ver su mirada de Ragnar de Vikingos.
Baje la mirada ante tanta presión y gire mis ojos viendo una vez más aquella escena de princesa que tenía montando.
—¿Te divertiste mucho amor?—Me preguntó subiendo mi barbilla con su mano, dándome un suave beso.
—¿Cómo entraste si la puerta estaba...?—Pregunté pero me interrumpió.
—Estaba cerrada—Terminó mi frase.
—Sí.
—¿Crees que eres la única que tiene la llave de esta habitación?-Me dijo moviendo las llaves en sus manos, restregándome su triunfo en mi cara—. Pero no te preocupes solo tú y yo tenemos las llaves.
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Miley Ashley
Teen FictionMiley Ashley ha vivido toda su vida con el resentimiento y la culpabilidad de pensar que mató a su madre meses después de su nacimiento debido a un paro respiratorio. No tuvo la culpa de nada, simplemente murió por sucesos básicos de la vida, donde...