Before you Go [l.s]

THE FIRST AND THE LAST

Louis vió como el doctor salía de la habitación y de inmediato corrió a él.

—¿Dónde está Harry? ¿Está bien? Dígame qué está bien— Louis estaba desesperado, no soportaba la idea de que Harry pudiera morir.

—Lo siento mucho— fue lo único que dijo el doctor.

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Nadia estaba entrando al pasillo, venía de la cafetería con unas donas para que Louis y los niños comieran algo, cuando vió a Louis tirarse al piso llorando y el doctor de Harry frente a él, supo que algo no andaba bien.

Corrió de inmediato a él y le quitó a los niños de los brazos para evitar que se lastimaran y miro al doctor.

Entonces se imagino lo que posiblemente estaría pasando, y no, se negaba que eso fuera realidad.

Nadia solo comenzó a sollozar junto a Louis.

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—¡Son una bola de inútiles!— gritó la abuela.

—Tranquila, al final de cuentas si se muere habrás cumplido con tu objetivo, ¡los separaste!— dijo Eleanor.

A ella realmente le daba lo mismo si Harry estaba vivo o muerto, a ella lo que le interesaba era cobrarle a Ernest todo lo que le debía a su padre.

—¡Si a Harry le pasa algo, tengan por seguro que la pagarán!— gritó de nuevo la abuela, estaba furiosa.

La abuela iba a hablar de nuevo para seguir maldiciendo cuando su teléfono sonó dentro de su bolsa.

—¿Diga?

—Madre, soy yo, Nadia— la abuela se preocupo al instante, Nadia no se escuchaba bien.

—¿Que pasa?

—Harry, él… él murió.

La abuela pudo jurar que escucho como su corazón se rompía.

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Cinco meses habían pasado desde la muerte de Harry.

Eleanor había sido descubierta con Ernest por la abuela, causo un revuelo en la casa que hizo que Nadia se enterará, ella en cuanto supo ni siquiera lo pensó y le pidió el divorcio a Ernest mientras que a Eleaonor la despidió de la empresa, no quería volver a verla.

La abuela aún se atormentaba a si misma, se sentía culpable de todas las desgracias que habían pasado.

Después de la muerte de Harry la empresa tuvo muchas perdidas monetarias pues habían perdido a su modelo estrella, Nadia había estado deprimida por dos meses, Hanna y Erik también al punto de que pasaban todo el día en la habitación de su hermano, sin comer ni dormir, solo mirando el lugar.

Después de varios meses de terapia estaban logrando superar poco a poco la muerte de su hermano y el divorcio de sus padres.

Louis después todo lo que pasó regreso a casa de su madre, no quería estar en el departamento lleno de recuerdos que solo lo lastimaban más.

Louis jamás volvió a ser la misma persona alegre y positiva de antes, la única razón por la que aún no se derrumbaba era por sus hijos y su madre.

Por dentro él estaba muerto.

Necesita Harry para seguir, necesitaba sus lindos ojos verdes, necesitaba su bella sonrisa, necesitaba sus risas contagiosas, necesitaba sus abrazos y sus besos, necesitaba su melodiosa voz, necesitaba sus pláticas tontas por la madrugada, necesitaba sus chistes malos, lo necesitaba para seguir.

Y todo era su culpa por no haberlo dejado, por no haber renunciado a él, por ser egoísta y solo pensar en lo que el sentía, sin importarle si Harry y su familia lo aceptaba, si el hubiera renunciado a Harry a tiempo, quizá Harry estaría aquí, quizá tendrían otra oportunidad.

Pero él hubiera ya no existe.

Harry era el amor de su vida, su alma gemela, un alma gemela con quién no estaba destinado a estar.

Fin.