-Hola mi amor- me besa la frente. No siento nada- ¿Como estás?-.
-Hola Will. Estoy bien ¿y tu?-.
-Bien pero... Creo que tu no lo estás. ¿Tu estado de animo tiene que ver con lo que me vas a decir?-.
-Si. Pero tenemos que hablar en privado-.
-¿Que pasa?-.
-No puedo decirte aquí. No enfrente de toda la escuela-.
Lo tomé de la mano y prácticamente lo jalaba, hasta que llegamos a un árbol muy lejano.
-No se por donde empezar...-.
-¿Que pasa? Desde la mañana me tienes preocupado- baja su cabeza- ¿tiene que ver con tu mamá?-.
-No-.
-Ya se lo que pasa...-.
-¿Enserio?-.
-Me quieres pedir que ya no esté junto a Miriam- me toma la mano- Supongo que ella ya te contó que tuvimos nuestra primera vez juntos-.
-¡¿Que?!-.
-Espera... No te pongas así. Aun no te conocía-.
-Will, se acabó-.
-¡No! ¿Porque? Eso es del pasado y...-.
-Will, no es por ella, ni por ti-.
-Diana, no me dejes, por lo que más quieras no lo hagas. Yo te amo-.
-Will, dejame explicarte-.
-No, no quiero, no entiendo- se veía tan frustrado- ¿por qué me estas terminando?-.
-Es una larga historia-.
-¿Y me la vas a contar?-.
-Si, pero no se por donde empezar. Y cuando te cuente todo tengo la esperanza de que vas a entender-.
-Está bien, se directa, me dolera pero será lo mejor-.
Y así fue, le empecé a contar todo. De principio a fin, iniciando desde el jueves en la casa de Chris hasta el día de ayer.
-Espera un momento... ¿Chris?¿Tu amigo gay?-.
-No es gay... Nada gay- sin querer solté una sonrisa.
-¿Y cuantas veces lo han hecho desde entonces?-.
-¿Enserio quieres saber?-.
-Si-.
-Tres veces- dije entre dientes.
Estaba tan serio pero sus ojos expresaban una gran frustración. Sólo me veía fijamente y ponía los ojos en blanco cuando le hacia un gesto.
-Deja de hacer eso-.
-Es desconcertante tu forma de actuar. Creí que eras diferente-.
-Yo también creí que era diferente-.
-¿Estas segura de lo que estas haciendo?-.
Will, no me hagas esto-.
-Diana, te perdono pero me gustaría que reflexionaras lo que haces. Creo que te estas dejando llevar por el sexo-.
-¡No es cierto!-.
-Todas las veces que se han visto es lo único que hacen-.
-También hablamos-.
-No es suficiente. No puedes amar a alguien que te quitó la virginidad. Piensa bien las cosas Diana-.
Sólo lo vi a los ojos pero meditando lo que dijo todo el cierto, las veces que nos hemos visto hacemos lo mismo y puede que sólo esté realizando su fantasía sexual.
-No quiero perderte-.
-Will... yo...-.
-Tomate tu tiempo- se acercó a mi, me abrazó muy fuerte y me besó tiernamente- yo te estaré esperando-.