-Gracias Diana-.
-¿De nada?¿Que agradeces?- le respondí algo confundida.
-Me acabas de hacer las cosas más fáciles-.
-¿Fáciles?¿Estás tratando de decir que soy difícil? Tú estas complicando las cosas- dejé de abrazar y me cruce de brazos.
-Perdón, te quiero y ya se que también me quieres pero no estaba seguro- se acercó a mi y me abrazó a la fuerza.
-¡¿Y porque no me has pedido que sea tu novia?!- el se sorprendió, yo me sorprendí, explote- ¡Que tonta soy! No tuve que decir eso, que vergüenza, perdón-.
-¡Hey tranquila!- me abrazó- no esperaba que dijeras eso pero tienes razón, yo he complicado las cosas, desde ayer te tuve que preguntar que si querías ser mi novia pero quiero pedirtelo de una forma de nunca olvides-.
-Con el simple hecho de que lo hagas me basta- lo alejé de mi- enserio yo te quiero demasiado, eres al primero que le digo "te amo", pero no se cuanto tiempo siga esperando- ¿así o mas sincera? Estaba a punto de arrepentirme de lo que había por ver su cara pero me mantuve.
-Y yo no quiero perder lo poco que he logrado contigo-.
-No es poco Will- lo miré seriamente.
Su mirada sería me decía todo lo que pensaba pero no era más que la pura verdad, por dentro me estaba destrozando pero tenía que ganar algo, se que Will y yo podemos llegar más lejos, es cosa de que él quiera.
-Yo... bueno... amm... ahora yo me siento presionado-.
-¿Quién te está dando presión? Yo solo te estoy diciendo que aunque te quiera no siempre te voy a esperar, me parte el alma decirte esto pero es verdad-.
El timbre para la siguiente clase estaba sonando, Will no dejaba de tener su mirada baja, el sabia que estaba en lo cierto, espero y haga algo.
-¿Nos vemos después?- me pregunto con la voz baja.
-Si, nos vemos después-.
Lo vi como se iba y se alejaba cada vez mas, me sentía mal conmigo misma, fui demasiado dura con el pero si no lo decía nunca trataría de hacer algo.
Las siguientes tres horas se me fueron volando, en esas horas no hice nada mas que pensar en lo que había pasado ¿Y si se aleja de mi?, es la primera vez que tengo algo parecido a una relación y creo que ya lo estaba arruinando.
Ya eran las 11:00 de la mañana, había terminado mi día, salí de la clase de Historia y me dirigí a mi casillero, cada que caminaba miraba a los lados esperando encontrar a Will pero no fue así.
Vi mi casillero y había un montón de globos flotando amarrados en las rendijas, corrí para saber de que se trataba, me acerque y lo abrí en cuando vi había un arreglo de flores, enserio que me impresiono ver eso ahí, también había un sobre, lo tome, lo abrí y ahí estaba una brújula hermosa y un pequeño letrero que decía " ve al norte, ahí encontraras el amor".
Parecía loco pero hice lo que decía tal nota, vi la brújula, note que el norte estaba a mis espaldas, me di la media vuelta y que quede atónita, la presión se me subió y bajo, no podía creer lo que estaba pasando. Ahí estaba Will arrodillado con una manta atrás de el que decía "¿Quieres ser mi novia?".
Me acerque a el y no podía borrar mi sonrisa ni el la suya. Tomo mi mano.
-Diana ¿Quieres ser mi novia?-.
-¡Si!- respondí eufórica, se levanto y me abrazo.
-Te amo, te amo, te amo, lo diría mil veces, jamas me voy a cansar de decirlo-.