Día 1: Agarrados de las manos

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Mukuro había conocido gente torpe a lo largo de sus vidas, más de una vez le tocó actuar de esta forma al poseer a gente con este rasgo.

Pero con sus siete vidas de experiencia podía decirlo con confianza: Tsunayoshi Sawada era el ser más torpe sobre la faz de la Tierra.

Todavía trataba de entender cómo podía tropezarse con sus propios pies tan a menudo. Eso, y como su rostro no se había desfigurado a pesar de tantas veces que había besado el suelo.

—Mukuro. —Lo llamó dicho castaño, sacándolo de sus pensamientos—. ¿Podrías soltarme?

—No.

—Pero la gente nos está mirando...

—Tsunayoshi-kun. ¿Quién fue el que terminó siendo arrastrado por la multitud y de cabeza en el suelo la última vez que viajamos de pié en el metro? —Le preguntó con una sonrisa angelical.

—...Yo. —Respondió desviando la vista para no ver esa sonrisa traumante.

Mukuro suspiró al notar que Tsuna seguía incómodo por la mirada de los pasajeros, a mucha gente en Japón todavía le costaba aceptar las relaciones homosexuales, así que dos chicos tomados de las manos terminaban llamando la atención de mala manera.

Gente entrometida que no tienen nada que hacer con sus vidas.

Pensó con disgusto mientras atraía a Tsuna hacia él para que no fuera empujado por la multitud que también debían bajar en esa parada.

—Vamos. —Le dijo a Tsuna cuando el tumulto disminuyó.

Bajaron del metro y empezaron a caminar rumbo a la casa del castaño, aunque las miradas seguían, Mukuro nunca soltó la mano de Tsuna.

—Tsunayoshi-kun.

—¿Mm?

—¿Te molesta tomarnos de las manos?

—¿Qué? ¡No! ¡No es eso, de verdad!

—¿Entonces?

Tsuna se mordió el labio algo inseguro, pero la mirada de Mukuro y un leve apretón en sus manos lo animó a hablar

—Es solo que no quiero causarte más malos recuerdos...

—...¿Qué? —Mukuro paró de caminar por la confusión.

—De por si no tienes una buena impresión de las personas y del mundo, así que no quiero empeorar eso ahora que estás empezando otra vez. No sólo por ser chicos los dos, yo no... Soy el mejor novio que podrías tener y... Podrían burlarse de ti por estar con dame-Tsuna.

Mukuro estaba mudo por la confesión del castaño, observó como éste permanecía cabizbajo y con su rostro rojo de vergüenza. Le molestaba saber que está no era causada por el bochorno de ponerse empalagosos o hacer alguna insinuación, no, esta era producto de todos los años en que las personas lo menospreciaron y que no había podido olvidar.

Apretando sus labios echó a caminar en dirección contraria a la casa de Tsuna, llevandoselo con él al seguir tomados de las manos.

—¿¡Mukuro!? Espe-. ¿¡A dónde vamos!?

—De momento vamos a recorrer todo Namimori tomados de las manos, así puedo desmembrar a cualquiera se atreva a menospreciarte.

—¡Hieee! ¿¡Por qué te pones violento de repente!?

—Porque de otra forma tú no entiendes. ¿El mundo? ¿La gente? Nunca me han importado ni lo harán. Caminaré de la mano contigo por la misma razón que somos pareja, porque te amo, seas dame-Tsuna, el Décimo Vongola o Tsunayoshi Sawada. Nadie puede despreciarte, ni siquiera tu mismo y de eso me encargo yo.

Tsuna sintió sus ojos picar al escuchar esto, observó sus manos entrelazadas y colocó su mano libre sobre estás como si todavía temiera que la fría mano de Mukuro soltara la suya.

—Mañana caminaremos por Kokuyo, no es opcional. —Le dijo Mukuro.

Tsuna no respondió, en cambio se aferró al brazo de Mukuro dejando escapar unas pocas lágrimas. El mayor suspiró y comenzó a consolar al castaño repartiendo caricias en su cabeza con su mano libre.

Sabía que la autoestima de Tsuna no se arreglaría de la noche a la mañana. Pero él planeaba acompañarlo y hacerle saber cuánto valía en cada día de sus vidas, pasara lo que pasara, él nunca soltaría su mano.

Fin

Yo: ¡Primer día del reto para celebrar el cumpleaños de la piña✧◝(⁰▿⁰)◜✧! Advierto que habrá mucha azúcar en estos retos así que tengan la insulina a mano(~‾▿‾)~.

30 Days Couple ChallengeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora