30 Days Couple Challenge

Día 19: Con ropa formal

Tsuna suspiró mirando el envoltorio en su mano, estaba solo en su habitación, cavilando la posibilidad de no salir de esta cuando la puerta se abrió.

—¿Por qué no me sorprende que aún no estés listo? —Dijo Mukuro cerrando la puerta y acercándose a él.

—Porque no quiero ir. —Masculló dejándose caer sobre su cama con el ceño fruncido—. Odio estas reuniones.

Mukuro suspiró y se sentó junto a Tsuna tomando su mano para confortarlo. Él tampoco se sentía cómodo, pero era algo que no podían evitar.

—Sabes que es necesario para evitar tensiones con otras famiglias, es por el bien mayor. —Tsuna bufó ante esto.

—En momentos así odio el bien mayor.

—¿Y qué momento es?

—El momento en que alguien importante para mí debe sufrir...

Mukuro sonrió y le dió un corto beso en los labios.

—Sabes que aunque pase un mal rato luego me vengaré, así que no le des tanta importancia. —Le dijo a solo centímetros de su rostro y tras recibir un asentimiento se levantó y abrió el clóset—. ¿Qué traje quieres usar esta noche?

—El que sea, pero pónmelo tú. —Mukuro paró de revisar la ropa e inspiró profundo para después mirar a Tsuna.

—Aunque me provoques no nos quedaremos en la cama Tsuna. —El aludido volvió a acostarse, sintiéndose derrotado

Mukuro rió levemente y tomó una camisa negra, con un traje y corbata blancos y los dejó en una silla para acercarse a Tsuna y ofrecerle su mano.

—¿Qué?

—¿No querías que te vistiera? —Tsuna parpadeó sonrojado, pero tomó la mano de su pareja y se levantó.

Con calma, Mukuro desabotonó la camisa blanca que Tsuna traía, asegurándose de besar sus hombros enrojecidos y clavículas mientras le quitaba la prenda para después retirar su pantalón y dejar ambos sobre la cama.

Disfrutó del sonrojó del castaño y tomó la camisa negra para ayudarlo a ponérsela, besando sus labios cada vez que abotonaba un botón, le puso el pantalón y repitió el proceso de la camisa cuando lo ayudó con el saco.

—¿Lo estás disfrutando cierto? —Le preguntó Tsuna mientras Mukuro anudaba su corbata con sus rostros a pocos centímetros de distancia.

—Kufufufufu, claro que lo estoy disfrutando. Eres adorable cuando hasta tus hombros se sonrojan. —Rió un poco más al recibir un suave golpe en su pecho por parte de Tsuna y terminó de ajustar la corbata—. Solo falta tu manto y podremos irnos.

Se volteó para tomar dicha prenda, pero Tsuna lo abrazó por detrás deteniéndolo.

—Te amo. ¿Lo sabes no? —Dijo aferrándose a su traje negro.

Mukuro tomó una de las manos de Tsuna que se aferraban a su pecho y la llevó a su rostro para besarla.

—Lo sé. Me amas como yo te amo a ti. Así que no pienses de más, lo que digan esta noche no nos afectará. No es la primera vez, ¿recuerdas?

Lo consoló sin parar las caricias en sus manos, hasta que finalmente su temblor se detuvo y lo soltó, pudiendo voltear a verlo.

—Ya estoy mejor, vamos Mukuro. —El aludido sonrió y lo volvió besar.

Esta vez de manera profunda para reiterar sus palabras anteriores.

—Vamos Décimo.

Colocó el manto de Tsuna sobre sus hombros y abrió la puerta de la habitación para ir a encontrarse con el resto de la décima generación.

Continuará...

Yo: Sí, volví a enlazar dos días (~‾▿‾)~. Y debo decir que no planeé hacer estos días angust, se suponía que fueran rosas y dulces y me salió esto XD.