Like blood in my veins

146 31 1
                                    


Si había un color que fuera triste, era el negro, o si lo pensaba Chan, odiaba tener que llevar ese color porque siempre significaba que alguien se había ido de su vida, así como pasó con Hansol quien solo había dejado a su familia rota y desconsolada.

Él deseaba poder encontrarse con aquellos chicos cuando pasaran cosas más agradables, pero tristemente eso parecía jamás pasar.

Aquel lugar estaba adornado con flores que parecían ser lo único alegre en aquel lugar, todas las personas que llegaban tenían una expresión de dolor y tristeza, y como no tenerla cuando un chico joven había muerto.

—¿Ya fuiste con la familia?—el menor negó ante la pregunta de Seungcheol.

—No pude.

Varios de ellos habían intentado acercarse a la familia para reconfortarlos, pero algo los detenía; vergüenza, ellos tenía una responsabilidad de cuidarlo o tan siquiera intentar saber que tanto pasaba por su mente y así evitar aquel final tan trágico.

—No puedo ver a su madre tan triste.—susurro Mingyu con un nudo en la garganta.—siento que fue mi culpa.

—Hansol nunca habló con nosotros sobre hacer esto o de algo más, era un chico demasiado cerrado.—agregó Wonwoo mientras miraba como Haneul llegaba al lugar, portando ropa totalmente oscura y una cara bastante demacrada.

—El quería tanto sanarse y poder disfrutar la vida.—MingHao jugaba nerviosamente con uno de los botones de su saco negro.—cuando me entente no podía creerlo, porque había quedado en vernos en unos días.

—Supongo que ya no pudo más.—Jihoon suspiro pesadamente.—en un solo mes dos han muerto y no sé si pueda seguir viviendo esto.

—No creo que ni los más fuertes puedan hacerlo.—terminó por decir Mingyu.

Con pasos lentos e inseguros Haneul se acercaba a la familia de Hansol quien desde lejos se podía ver destruida, y era obvio que lo estarían habían perdido a un hijo y a un hermano mayor, aquel vació jamás podría ser llenado y su muerte siempre viviría en ellos, también se culparían por no haber estado ahí con el en su última gran lucha y es que Haneul podía hacer una imagen mental de lo que habían sido sus últimas horas.

Hansol regresaba a casa después de haber estado en casa de Seungcheol, seguramente se encontró con su familia alistándose para salir a hacer las compras, el debió tomarse su tiempo para despedirse de ellos porque ya tenía en su mente lo que haría y que esos serían los últimos instantes donde podría disfrutar verlos, escuchar sus voces y sentir la piel suave de su hermana menor abrazándolo con firmeza antes de quedarse solo en casa, recorriendo por última vez esa casa donde creció, quizás se tomó un tiempo para observar esas fotografías que adornaban su hogar, después caminar una última vez a su habitación, tomarse un momento para reflexionarlo todo de nuevo y darse que realmente le tenía miedo a morir, pero temia mucho más llegar el punto donde ya no sé reconociera a sí mismo nunca más por lo que decidido, busco todas las pastillas que debía tomar cada día, vaciando cada frasco en la palma de su mano y tomando el último impulso para ingerirlas todas.

Su cuerpo poco a poco dejando de reaccionar y por fin después de tanto tiempo sentir que era el mismo.

—Lo lamentó mucho de verdad.—Haneul había llegado hasta los padres de Hansol con los ojos lloroso con solo pensar en ese escenario tan triste.

Las cálidas manos de la madre de Hansol la reconfortaron demasiado, y aunque era seguramente el momento más difícil de su vida aun así se miraba en cierta parte tranquila y quizás era porque ella conocía bien todo el sufrimiento de su hijo, y el ahora estaba por fin descansando.

Inconscientemente todos se reunieron en un grupo que realmente llamaba bastante la atención o al menos la atención de Haneul, pero no tenía intención de ir hacia ellos, no en ese momento donde sabía bien qué era mas débil de lo normal por lo cual prefiero ir hacia donde estaban otras personas, ahí se sentiría segura porque ya no se sentía tan atraída a ser arrastrada con esos chicos.

—¿Usted era amiga o familiar?—Haneul miro al señor a su lado portando como todos los demás un traje negro, ya se miraba de avanzada edad.

—Solo era una conocida.—respondo la joven intentando ser cortes.

—Lo siento.—el señor parecía apenado de verdad.—solo pensé que por ser más o menos de la misma edad sería amiga.

—Solo lo conocí poco, pero usted ¿es?

—Yo era su doctor.—Haneul empezó a poner atención.—hasta solo hacía unas semanas, antes de que la familia decidiera ir en busca de otro doctor.

—¿Por qué la familia haría eso?—el doctor negaba mientras bajaba la mirada.

—Hansol dejó el tratamiento que estábamos llevando justo cuando iba mejor que nunca.—esa afirmación confundió a Haneul.—por lo cual a mi también me sorprendió, si hubiéramos seguido, él hubiera tenido más tiempo de disfrutar su vida de forma plena.

Haneul intentaba unir cada hilo, pero sentía que algo se le estaba pasando por algo.

—¿La familia no intento contactarlo después?—la joven cuestionó intentando sacar más información.

—No y yo intenté contactarlos, pero jamás respondieron a mis llamadas, hasta llegue a pensar que teníamos mal su número de contacto.

—Tengo que que irme.—Haneul intento sonreír aunque realmente quería salir corriendo.

Rápidamente Haneul empezó a unir todo y quería estar equivocada, pero al estar presente en aquel funeral todo parecía encajar perfectamente.

—¿Estas bien?—Haneul había sido detenida.

—Alguien le hizo esto a Hansol.—ella apenas pudo ver que Soonyoung estaba deteniéndola por los hombros.

—¿Cómo? Espera debes decirle a los demás.—el rubio miro como la joven negó rápidamente y su respiración se volvía pesada.—¿no quieres?—Haneul volvía a negar.—bien, vamos a fuera.

Del otro lado todos los chicos miraban como ambos salían del lugar, era una escena tan rara, pero siendo sinceros ya pocas cosas les parecían fuera de lugar.

—¿Por qué saldrían? Debían venir.—comentó Jihoon.

—Haneul se miraba alterada.—dijo Mingyu mirando aún donde hacía segundos habían estado Soonyoung y la joven.

—Kwon nos dirá lo que ella le diga.—dio por terminada la conversación el mayor de todos con un tono frío.










________________________________
Empezamos la cuenta regresiva al final.

Deep End • SeventeenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora