Ahora la verdad se sabía y con ella todos los temores de Soonyoung, él sabía que algún día aquello pasaría, pero no de aquella forma, no de forma tan abrupta.—¿Es cierto?—Jihoon ni siquiera lo miraba.
El rubio quería decirle que sí, le gustaba, lo quería más que como a un amigo, que estaba enamorado de él , pero las palabras no salieron.
—¿Cómo pudiste hacerme esto? Sabes que no suelo hacer amigos y yo te consideraba mi amigo.
—Amar a alguien no es un pecado.—la voz de Soonyoung era delicada.
—No, no lo es, pero yo no quiero.—el más alto sabía lo que seguía.—que me ames.
—Ni siquiera me has dado la oportunidad de demostrar que lo que siento es real.
—No lo haré, no me gustas Soonyoung.—Jihoon por fin lo encaraba.
—Pero.—el rubio no quería darse por vencido.
—Eso jamás pasará, te quiero lejos de mi.
—¿Qué?—el pánico se miraba en el rostro del mayor.—¿solo porque te quiero?
—Es mejor para mi, y quizás tú puedas superarlo.
—Jihoon.—Soonyoung había dado un paso cerca de él, pero el bajito se alejó.
—¿Quién mas sabe de esto?—el más alto no podía entender la actitud del otro.—sé que eres fan de contarle todo a otras personas así que no dudo que todos lo supieran menos yo.
No hacía falta ni una palabra más para romper cada esperanza de Soonyoung, ya no había rastro del Jihoon con el que había pasado tanto tiempo siendo feliz, ahora hasta parecía que lo odiaba.
—No le dije a nadie para que no te preocupes.—el rubio también intento ser frío como Jihoon lo estaba siendo.
—Eso espero Kwon Soonyoung, espero todo ese jueguito termine pronto porque de verdad no deseo seguirte viendo después de esto.
Y así terminaba aquella historia que realmente jamás había empezado, y a su paso dejaba un corazón roto que aún añoraba una pequeña esperanza, por lo que Soonyoung se atrevió abrazar a Jihoon, quien se quejó e intentó apartarse.
—Lamentó mucho que me odies.—susurro Soonyoung.—perdóname haberme enamorado de ti, prometo no molestarte nunca más.
Algo dentro de Jihoon dolía, tanto que quería disculparse por su arrebato, el no odiaba a Soonyoung ni lo quería lejos, solo no quería lastimar su corazón.
El ruido de un arma lleno el lugar dejando bastante sorprendido a Jihoon, su primer instinto fue separarse del chico para ver qué sucedía, pero el fuerte abrazo de Soonyoung se volvió débil.
El rubio ya no se sostenía por sí mismo.
—¡Soonyoung!—Jihoon gritó en cuanto vio qué es lo que realmente había sucedido.
La sangre rápidamente se esparcía por el suelo, una herida de bala justo en el corazón era la causante.
—¿Qué pasó?—Haneul se quedó muda en cuanto vio aquella escena.—Llama una ambulancia.
Seungcheol estaba a su lado, pero estaba en shock.
—¡Rápido!—Haneul había sido la primera en acercarse al cuerpo del chico para intentar parar la sangre aunque en el fondo supiera que aquello era en vano.
Jihoon estaba a un costado con una mancha de sangre en su ropa, lentamente él se acercó al chico que yacía en el suelo, aún respiraba, lentamente y se podía ver como la vida se le iba.
Para el bajito todo estaba en cámara lenta, Haneul estaba intentando frenar la gran cantidad de sangre que salía y Seungcheol llamaba a la ambulancia se miraba nervioso. Jihoon buscó tomar la mano de Soonyoung, estaba fría con esa simple acción obtuvo una miraba del chico, se estaba apagando rápidamente, dejándolo.
—No te vayas.—a penas alcanzo a decir Jihoon antes de que ya no hubiera más señales de vida por parte del rubio.
—¿¡Donde está la ambulancia!?—Haneul estaba desesperada.
Jihoon mantenía su mano enlazada a la de Soonyoung aunque este ya no estuviera respirando, quería aferrarse lo más que pudiera a el.
Seungcheol se hacía a un lado para dejar que los paramédicos pudieran hacer su trabajo, mientras Haneul lloraba una vez más al ver que los paramédicos negaban ante posibles señales de vida.
Lo siguiente había sido más difícil de aceptar para Jihoon; tenían que llevarse a Soonyoung y eso significaba ya jamás verlo, dejarse de aferrar a lo ultimo que tenía por lo que Seungcheol tuvo que intervenir sosteniendo fuertemente al bajito mientras gritaba suplicando que no lo alejaran de Soonyoung y las primeras lágrimas aparecieron.
Era real Soonyoung había fallecido delante de sus ojos, sin darles oportunidad de salvarlo.
—Ven aquí.—la joven atrajo de Jihoon a sus brazos ambos lloraban.
—No debí.—Jihoon sollozaba dolorosamente.—decirle que lo odiaba.—él se aferraba al pequeño cuerpo de Haneul.—el, él no.
Por primera vez Lee Jihoon se venía abajo completamente, sus defensas estaban rotas y es que nunca antes algo le había dolido hasta el alma como aquello.
—Iré con los paramédicos.—Seungcheol no sabía qué más hacer o decir.
Al no recibir respuesta él se fue con el corazón pesado, el ver a alguien tan fuerte como Jihoon derrumbarse era demasiado para el y ahora también cargaba con la responsabilidad de avisarle a los demás que Soonyoung había sido asesinado en su casa, a plena luz del día, uno más de ellos que caía.
Todo estaba mal, ellos no merecían estar temiendo por sus vidas y mucho menos muriendo por algo que había sido un error.
—Prometí protegerlos.—dijo Seungcheol para si mismo en el elevador.
En su reflejo podía verse, pero a diferencia de otras ocasiones no miraba al Choi Seungcheol fuerte y más listo que los demás, sino miraba a un cobarde, había prometido demasiadas cosas y con ninguna había cumplido. No era más que un niño jugando un juego mucho más grande que el mismo.
Al llegar al piso de abajo todos estaban reunidos intentando saber que había sucedido y porque había una ambulancia frente al edificio, muchos murmuraban al ver pasar a Seungcheol, pero en ese momento no le interesaba siquiera saber que podían decir de él, en ese momento en lo único que podía pensar es que delante de él iba un amigo suyo, alguien que hasta cierto punto lo había entendido.
A su memoria rápidamente venia imágenes de las primeras veces que miro a Soonyoung, con su cabello rubio, con una sonrisa y saludando a todos, claro al principio fue una molestia que después se volvió costumbre, una agradable costumbre, Soonyoung había sido un caso más pedido para la sociedad, pero para ellos había sido el único que les dio una sonrisa cálida cuando lo necesitaban.
Aquel día el mundo había perdido a un ser de luz demasiado grande para ser comprendido.
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Poco a poco nos acercamos al final, ¿cómo sienten vaya la historia?
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Deep End • Seventeen
Fanfiction"Estoy perdido en la profundidad" *segunda parte de Twisted Games*