𝐄𝐒𝐂Ú𝐂𝐇𝐀𝐌𝐄 - 𝐍𝐇 𝐁𝐘 𝐍𝐀𝐓𝐇 🥀

18.

Capítulo 18.

El cielo nublado y las amenazantes nubes grises hacen que todo se vea un poco terrorífico mientras avanzamos entre las lápidas, me da miedo. Pero yo le dije a Niall que podíamos venir igualmente.
Su mano sostiene firmemente la mía mientras caminamos los últimos pasos hasta la tumba de Ryan.

-Es aquí. —Susurra, su voz apenas audible.

Ambos nos detenemos frente al lugar donde yace su hermano. Mi corazón se encoge al ver su fecha de nacimiento y el día que murió. Era demasiado joven, muy joven.
Niall suelta mi mano para que yo pueda dejar sobre la tumba las rosas rojas que compré, fue algo que el no se esperaba, pero realmente quería hacerlo.
Durante algunos minutos nos quedamos en silencio, él se sienta en el borde de cemento y saca algunas hojas secas que han llegado por la brisa.

-Hola Ryan, soy Alessa. —Digo cuando el silencio comienza a prolongarse demasiado. Niall al escucharme sonríe levemente.

-Eres como mi madre. —Me dice dándose la vuelta para mirarme. —Ella siempre le habla.

-¿Tú no lo haces? —Le pregunto.

-No. Antes lo hacía, pero era solo para decirle la mierda de hermano que era por dejarme solo. —Me cuenta y desvía la vista.

Me cambio de ubicación rápidamente, me siento a su lado y tomo sus manos. Él vuelve a mirarme, puedo notar que aún dentro de su corazón existe resentimiento.

-Él no estaba bien. —Digo. —Lo sé por experiencia propia. Aveces no podemos ver más allá y pensar en nadie más. —Digo y sus ojos me observan con preocupación.

-No me digas eso Alessandra. —Me pide. —Me duele aquí, de solo pensar que podrías cerrarte en ti misma. —Agrega llevándose la mano a su pecho. —No podría soportarlo.

-Oye, no haré nada. —Me acerco a él y lo abrazo por el cuello. —Estoy aquí, contigo. Lo estaré siempre.

Sus brazos envuelven mi cintura y me aferra fuertemente.

-Te quiero, no me dejes solo. —Me pide apenas en un susurro.

-Jamás lo haré, te quiero mucho. —Me alejo un poco para ver su rostro. —Y tú no me dejes a mi.

Él sonríe.

-Jamás. No puedo dejar de pensar en ti.

Mi estómago se llena de mariposas al escucharlo mientras mis mejillas se tornan de un color carmesí. Una de sus manos acaricia mi espalda baja mientras que la otra hace lo mismo en mi cabello.

-Está comenzando a llover. —Digo cuando sus labios se posan sobre los míos.

-Sí. —Susurra y me besa dulcemente antes de alejarnos. —Pasemos el resto de la tarde en mi casa.

-Sí. —Respondo mientras me levanto. —Adiós Ryan, perdón por estar tan poco tiempo, pero no tengo otro cambio de ropa por si la lluvia nos alcanza. Prometo venir otro día. —Cuando termino de hablar Niall esta mirándome detenidamente. —Dile adiós.

Él se niega y tomo su mano.

-Está bien. —Se queja. —Nos vemos imbécil, otro día vendré a derramar lágrimas. Te echo de menos. —Agrega y me arrastra lejos del lugar.

Mientras caminamos hacia el aparcamiento y las gotas de lluvia comienzan a alcanzarnos, no puedo dejar de pensar en lo frágil que es Niall. Cuando lo conocí, vi a un chico sonriente, comprometido para ayudar al resto, alguien que era realmente fuerte, pero ahora que paso mas tiempo con él, me doy cuenta lo roto que está, y lo difícil que ha sido todo esto para él.