" una mano "

12 1 0
                                    


Volví a casa con la esperanza de encontrarla en la calle, con su mirada distraída, pero quizá le tomaba mucha importancia, los chicos y yo nos quedamos en el estudio un par de horas más, había algo de presión ante nosotros por lo cual no podíamos distraernos ni desenfocarnos,  pero por alguna razón, yo ya lo estaba.

Durante toda la noche me costó dormir, no podía dejar de pensar en ella, y en lo que decían esas chicas.

¡Basta, Dongmin! — exclamé  tallando mi cabeza con mis manos, estaba perdiendo el control—

Solo debo dejar de entrometerme, ella no es importante, para nada.

~Día siguiente~

Como había comentado anteriormente, me fue difícil poder dormir, en un parpadear ya me encontraba en el instituto,  estaba en mi aula tratando de poner atención al tema que veríamos hoy, mis amigos aún no llegaban, faltaban unos cuantos minutos para comenzar con las clases generales, los estudiantes comenzaron a correr en una sola dirección, como si algún famoso entrara por la puerta principal, había murmullos, y eso, levanto la inquietud en todo el aula.

Como todos, salimos a ver lo que sucedía, no se trataba de ningún artista, ni mucho menos de alguna actriz, si no, de ella, en su llegada, todos la miraron como si supieran su más grande secreto, así era estar en una escuela tan popular y prestigiada como esta, ella caminaba sola, sin algún acompañante, sabía que estaba incómoda, aunque no lo notara, lo podía sentir.

—¿Cómo puede ella estar con Jisoo y su grupo?—  susurró una de las chicas—

Así que eres tú la chica que huyó de casa, ¿eres una criminal?, ¿Qué fue lo que molestó a Papi?— cuestionó un chico, no solía recordar los nombres de las personas que me resultan insignificantes,  pero anteriormente, ha sido un problema para

La chica permaneció en silencio,trataba de evitar a cada una de las personas que se paraban frente a ella, al parecer, odiaba el contacto físico, lo noté en el momento que se apartó cuando se atrevieron a tomarla del brazo.

—¿Acaso no hablas?, ¿Eres sorda?— dijo el chico comenzando a desesperarse por su actitud, la tomó del brazo con fuerza tratando de detenerla, algo en mí reaccionó —

— No te atrevas a tocarla — ordené apartando su mano de ella, podía sentir su mirada, y la de todos los demás —

La tomé del brazo y la saqué de ese horrendo momento, no mencioné ni una sola palabra durante el camino, y ella, solo permanecía atrás de mi, no apartó mi mano, solo me seguía por los pasillos como si esa tensión acabara.

Era la primera vez que hacía algo así, que chica tan rara.

~tiempo antes~

Al salir de la biblioteca me marché al departamento, tomé mi ordenador y justo como lo pensaba, la noticia de mi partida estaba por todos los medios, no era algo que me inquietaba o me asustara, mi celular comenzó a sonar, era una llama entrante de Rose.

— Hola, ¿ya viste las noticias?

- Si, no esperaba menos,¿cómo estás?-

— Las chicas y yo volvimos  al instituto a buscarte, creíamos que había pasado algo

-No te preocupes, estoy bien, las veo mañana en el aula-

— Está bien, cualquier cosa llámame, te enviaré un artículo

-Gracias, Adiós

Justo como Rose lo dijo, al poco tiempo me envió un artículo digital, una estúpida entrevista de mi padre, la cual no decidí escuchar, ni siquiera abrir, ahí, había acabado Lalisa Manoban.

Al llegar al instituto,  siempre he sido puntual, aún faltaban unos cuantos minutos, mis amigas y yo nos veríamos en el aula, ya que solíamos venirnos por separado algunas veces, y esta era una de esas.

Al ingresar, las personas presentes me observaron con mucha atención, murmuraban entre ellos y me señalaban, poco a poco, el rumor se volvió más grande, en poco tiempo estaba rodeada.

—¿como puede ella estar con Jisoo y su grupo?— cuestionó una de las chicas

— Así que eres tú la chica que huyó de casa, ¿Eres una criminal?— cuestionó un chico, en mi vida lo había visto

Intenté evadirlo, pero me sujetó del brazo con fuerza, por más que trataba, me sujetaba con mucha más fuerza.

— ¿Acaso eres sorda?— cuestionó en voz alta—

No te atrevas a tocarla— ordenó el chico de mirada intensa, apartó la mano del tipo, al sujetarme,  me sacó del pasillo donde me encontraba atrapada, no se lo que ocurría, las personas nos miraban extrañados, y los murmullos no paraban.

¿Cómo apareció tan rápido?

La Historia De Los Siete Colores (Precuela De Atrévete a Amar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora