La Historia De Los Siete Colores (Precuela De Atrévete a Amar)

" A un sólo paso "

—Lalisa Manoban, fue un gusto conocerla— el señor Min Ho estrechó su mano con la mía al finalizar la entrevista, los camarógrafos guardaban el equipo para marcharse—

—El gusto fue mío — dije amablemente —

—Estaremos en contacto — al marcharse, mis amigas corrieron a abrazarme, podía notar la felicidad en sus rostros —

— No es para tanto — comenté sonrojada—

— Lo hiciste Lisa, ¡por fin lo hiciste!— exclamó Rose alegremente —

—Lo hiciste bien— comentó Dongmin sin apartar los ojos de mí,  las chicas se apartaron para darme mi espacio —

—Gracias por estar aquí, fue más fácil —

—Bueno, debemos celebrar, ¿no?—cuestionó Rocky mientras reía —

—De echo...hay algo que debo hacer— Respondí mientras miraba a Dongmin —

—¿Qué es?— cuestionó Jisoo—

—Iremos con tu padre — respondí sin apartar la vista de él —

—¿Por qué?— era confuso lo que decía, pero de un modo u otro, debía agradecerle —

—Me has ayudado en todo lo que has podido...es momento de que yo haga lo mismo por ti— su rostro cambió por completo, ni siquiera se negó, ni mucho menos se forcejeó para apartarse de mi cuando tomé su mano, solo...decidió seguirme—

Al salir de la editorial, me esperaba camarógrafos en la entrada, y así era como pasó,  cada paso era difícil, aún cuando los guardias los apartaban, eran más intensos, como se pudo, todos subimos a los autos y nos marchamos sin decir una sola palabra a la prensa, Dongmin, conducía en silencio, no había música, no había ruido, sólo él y yo...

Las chicas se fueron a descansar,  al terminar con Dongmin,  iría a buscarlas, Rocky y el resto del grupo, decidieron ir al estudio, habían sido días intensos para todos.

Al llegar a la Agencia, Dongmin se estacionó y permaneció frente al volante por varios minutos, entendía que necesitaba tomar un respiro, así que le di su tiempo.

—¿Sabes?... — fue ahí, cuando aquel silencio se rompió —

—Dime—

— Él intentó...arreglarlo muchas veces— su voz era diminuta, pero el calor en ella seguía ahí —

— Andando— al tomar su mano, quería que sintiera que yo estaría ahí, pasara lo que pasara, ahí estaba yo—

Al bajar, subimos hasta la oficina de su padre, al estar frente a la puerta totalmente cerrada, dudo en golpear, pude sentir el pequeño suspiro que salió de su boca, cerró los ojos, y solo espero...

Aquel golpe se escuchó segundos después para después abrirse la puerta mostrando al hombre que tanto temía ver, sin mencionar una palabra, solo se miraron, pequeñas lágrimas brotaron de los ojos de Dongmin para después abrazarlo con fuerza, al ver respuesta de su padre, me hice a un lado... era el momento más conmovedor que presencié.

Los miré de lejos sin hacer un solo ruido, pero la sonrisa me era inevitable, al parecer charlaban tranquilamente, Dongmin, regresó su vista a mí,  hizo una pequeña señal pidiéndome que me acercara, a lo cual no tuve problema alguno.

—Papá, ella es Lisa, Lisa Manoban— comentó Dongmin presentandome ante su padre —

— Mucho gusto señor Lee— una enorme sonrisa se dibujó en el hombre, tanta era la felicidad, que en vez de estrechar su mano, me abrazó con amabilidad —

—Gracias...Lisa— 

Los abrazos nunca fueron mis favoritos, o algo que necesitara después de un tiempo, pero justo en este momento, pude sentirme importante, pude sentirme plena,pude sentirme necesitada, pude sentirme viva.