La pareja perfecta

Capitulo 19

~Gabriel~

Llevamos dos horas de viaje y yo quería regresar a casa, la semana había pasado sumamente rápido y en menso de lo que me había imaginado ya era viernes y me encontraba subido en mi coche en compañía de Ame.

Intentaba distraerme mirando a la carretera pero no había forma, si darme cuenta mis pensamientos volvía a mi padre. ¿Se vería peor que la última vez? ¿Estará enojado por haberle dejado solo por tanto tiempo? No lo sabía, y no lograría saberlo hasta llegar a casa, aunque una parte de mí lo extrañaba la otra no quería ver a ese hombre fuerte que algún día fue varado en una cama cada vez más débil.

-Ey, deja de pensar tanto- dijo Ame tocando mi hombro delicadamente- todo va a estar bien, pero si sigues así tu cabeza empezará a echar humo en cualquier instante.

-No lo puedo evitar- respondo girando mi cabeza y mirándola rápidamente antes de volver mi atención a el camino.

-Entonces juguemos al veo veo ¿te parece?

Estuvimos jugando bastante rato hasta que nos dio hambre.
Habíamos salido apenas Ame termino clases y ninguno había almorzado así que cuando el reloj del carro marco las 4:30 decidimos buscar un lugar donde comer.

Estacionó el coche en un pequeño lugar en el que dice que se vende almuerzos y desayunos y qué hay comida las 24 horas, y una vez estamos fuera del auto nos adentramos al local.

Nos recibe una señora bastante amable que nos indica donde poder sentarnos y antes de retirarse nos da un menú a cada uno y nos dice que en un momento su hija nos tomará la orden.

Como lo indicó en pocos minutos aparece una chica de unos 17 o 18 años con un delantal lista para tomar nuestra orden.

-¿Ya saben que van a pedir?

-Si- decimos Ame y yo al unísono.

Cada uno pide lo suyo y antes de marcharse la chica vuelve a hablar.

-¿Usted son pareja ?

Ya quisiera

-No, para nada.

-Genial- dice antes de estirar su muñeca en mi dirección, le doy una mirada a Ame pero ella no hace nada y su cara está impasible haciendo imposible que sepa que es lo que piensa.

Estiro mi muñeca he intento que mis esperanzas por que ella sea la ideal no vayan en aumento.

El círculo que me indica cuánto es el porcentaje aparece en nuestros brazos y que sorpresa, solo somos 43% compatibles.

-Que mal- responde la chica antes de girarse en dirección a Ame para descubrir cuán compatibles son.

-Yo no tengo.- responde Ame secamente haciendo que la sonrisa de la chica vacile por unos segundos antes de volver a hacer como si nada.

-Oh que mal, bueno ya regreso con su orden- dice antes de retirarse en dirección a la cocina.

-Vez, por eso odio salir de casa.- habla Ame cuando la chica desaparece de su vista. - Todos te tratan bien hasta que descubren que no tienes la inyección, en esos momentos todos huyen y me ven como loca.¿Acaso uno no puede tomar sus propias decisiones?

-Claro que puedes tomar tus propias decisiones, pero cada uno es diferente, y por eso se crearon las inyecciones ¿no? Para que nadie se sienta excluido y tenga a una persona a quien acudir y que tenga los mismos ideales que ella.- respondo tratando de que lo vea de otro modo.

-No, eso es una excusa que la personas buscan para intentar ser felices, pero yo se que puedo ser feliz sin ninguna otra persona, solo necesito de mi misma.- dice convencida antes de coger su celular y dejar de lado nuestra conversación.

¿Quien había hecho tanto daño a Ojos Bonitos? De seguro alguien la había hecho bastante daño ya que tanta convicción para decir que solo se necesitaba a ella misma significaba que esa idea se la había metido en la cabeza a las malas.

Terminamos de comer y seguimos nuestro camino, la música sonaba de fondo, muy bajo para poder distinguir quien la cantaba, pero ahora no solo pensaba en mi padre, sino en Ame, tanto rencor no debía ser bueno.

********

Ya estaba llegando a casa de mi padre, no hubo tráfico en el camino así que pudimos llegar en 9 horas, y me encontraba completamente agotado, manejar por tanto rato no debía ser sano.

-Ame-susurró a mi copiloto que se quedó profundamente dormida hacia bastante rato.-Ame- vuelo a intentar esta vez soltando por un segundo el volante para toparle el brazo.- Ojos Bonitos - habló un poco más fuerte intentando que despierte, vaya que tiene el sueño pesado.

Estacionó el carro frente a la casa de mi padre, la calle esta vacía y las únicas luces que ilumina son las de las farolas, la gran mayoría de casas también están a oscuras, ya que son poco más de las 10 de la noche.

Desabrocho mi cinturón de seguridad para poder zarandear a Ame, no hay manera. La chica no despertaría ni aunque su vida dependiera de ello.

Rendido salgo del coche y me dirijo a la puerta de mi casa, seguramente Marcela sigue despierta y me puede ayudar a llevar nuestras maletas mientras yo cargo a Ame.
Toco el timbre y en menos de dos minutos Marcela sale a recibirme con una gran sonrisa, automáticamente yo sonrío mientras ella se acerca y me abraza.

-¿Como estás Gabri?- pregunta Marcela en tono maternal, sus ojos oscuros me miran con un brillo de alegría, yo también la había extrañado.

-Bastante bien, ¿me puedes ayudar llevando las maletas?-

-Que alegría, ¿te vas a quedar por mucho tiempo? Porque en ese caso tendré que limpiar otra vez tu habitación, no tuve tiempo de quitar el polvo a muchas cosas. Pero definitivamente me alegra y...

-No, no me quedaré por mucho- cuando mis palabras salen de mi boca veo como su cara de entristece.- vine con mi amiga.

-Si ya, seguro sólo tu amiga- dice antes de dirigirse al coche y dejándome un poco confuso.

Claro que era mi amiga. Estaba seguro.

-Bueno, yo me encargo de llevar a Ame y tú llevas el equipaje- digo alejando esos pensamientos de mi mente, Ojos Bonitos era mi amiga y ni podía ser nada más, ella no tenía la inyección y por ende jamás descubriría si lograría ser feliz junto a ella.

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Hola gente, ¿Cómo están?

Bueno, se que dije que el martes publicaría el capítulo, pero no lo logré, así que posiblemente el sábado suba otro capítulo en recompensa.

Esto era todo, así que nos vemos pronto, adiós.