☕ ⁞ ❝ Ahí está tu sonrisa, enamorándome deprisa. ❞
Jisung trabaja como mesero en la cafetería Chimmug y allí podrás ver al mismo chico en la mesa del rincón todos los días... Su nombre es Hyunjin y quizás viene por algo más que el café.
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—Han Jisung —saludó con una sonrisa al mesero que se acercó a su mesa.
—Hola, Hyunjin... —saludó en voz baja al cliente de la mesa del rincón—. ¿Lo mismo de siempre?
—Sí, un café macchiato... pero hoy quiero pedir algo más para acompañarlo. No sé, ¿qué me recomiendas?
—Pues... —Han bajó la mirada un momento y luego volvió a mirar a Hyunjin—. Te recomiendo el cheesecake de fresa, es delicioso. Cuando no hay clientes en la cafetería siempre me robo un poco —confesó aún en voz baja, mientras sonreía.
—Estupendo —aceptó devolviendo la sonrisa—. Entonces un café macchiato y un trozo de cheesecake de fresas, por favor.
—De acuerdo, su pedido no demora —dijo para luego hacer una reverencia y alejarse de la mesa.
Después de un rato Jisung volvió sosteniendo un plato con una taza de café y otro con el cheesecake. Hyunjin ni siquiera había sacado su libro o su libreta, estaba completamente embobado mirado a su mesero en silencio.
—Aquí está su pedido, espero que lo disfrute —Han dejó ambos platos sobre la mesa y sonrió nuevamente—. ¿Desea algo más?
—De hecho sí, una cuchara y tu número de teléfono —respondió Hyunjin aprovechando la situación.
—Oh, claro, olvidé la cuchara... —le tomó un momento procesar lo que acababa de escuchar—. Espera, ¿¿qué?? —dijo subiendo la voz por primera vez, borrando su sonrisa de inmediato.
—Tu número de teléfono.
—Y-yo... —Han bajó la mirada y ocultó sus manos detrás de su espalda, estaban temblando como nunca—. Voy a traer la cuchara —dijo casi inaudiblemente.
Jisung se alejó de la mesa del fondo rápidamente. Sus piernas por poco colapsan. Su corazón latía tan rápido que podía sentirlo en su garganta. Intentó tomar una cuchara, pero sus inservibles manos temblorosas ni siquiera pudieron con eso. Era patético. Había entrado en pánico por solo 4 palabras.
Entró al baño de servicio y se mojó la cara con agua varias veces. Respiró profundo y luego salió a pretender que no estaba completamente descompuesto por dentro.
—Aquí está la cuchara —murmuró dejando la cucharita de postre en el plato junto al cheesecake de Hyunjin.
—Muchas gracias —sonrió—. ¿Qué hay de lo demás?
—E-es que... —Han ya no se atrevía a hacer contacto visual—. Déjame pensarlo —susurró antes de alejarse de la mesa.
Hyunjin suspiró y dejó de mirar al mesero adorable de la linda sonrisa. Quizás estaba siendo demasiado intrusivo, era mejor darle algo de espacio. Observó por fin el café que tenía frente a él y notó que el dibujo con crema era una fresita. Con una sonrisa probó el cheesecake y se sorprendió ante el buen sabor que tenía. No solían gustarle las cosas dulces, pero aquel pastel no sabía nada mal.
