Little Nightmares School AU

...Y Un Paso al Frente y un Paso Atrás...

RG buscó por todas partes, dio pequeños brinquitos sobre la punta de sus pies para tratar de ver más allá de lo que su corta altura le permitía, algo complicado pues cargaba en su hombro un saco de tela a punto de ceder por las cosas que tenía dentro, un pedido del propio Seven que incluía un disco de vinilo cuidadosamente colocado para no estropearse, un par de linternas, una sabana roja y un objeto que el niño permitió que RG trajera por mero gusto; a lo lejos divisó a Mono, aún con la bolsa de papel en la cabeza pero doblada de la parte frontal para evitar estropearla, pues el pequeño se estaba merendando un emparedado de sabe dios donde lo habría sacado. Luego miró hacia el otro lado de la cancha escolar y vio a una pequeña niña de pelo oscuro y enmarañado, era Six, quien de igual forma revisó el área de un lado a otro. RG entonces salió en su encuentro.

-¡Hola, Six!- saludó intentando contagiar alegría, como siempre.

-Hola, RG- contestó Six, que si bien no demostró el mismo entusiasmo en su voz, el abrazo que le dio a la niña de impermeable amarillo bastó para mostrar sus sentimientos.

-También te extrañe- dijo RG acariciando la cabeza de Six -¿Seven también te llamó?

-Si, igual a Mono, creo que estaría por aquí.

No se equivocaba, apenas entró en su rango de visión, Mono estiró su brazo y lo agitó rápidamente para tratar de llamar la atención de la niña. Six no lo ignoró y se dirigió hacia él, tomando a RG de la mano y jalándola para allá; Mono lentamente bajó su mano. El apretón se sentía extraño, Six presionaba con fuerza la mano de RG y esta apenas y podía corresponderle, pues sus dedos se sentían asfixiados por el apretón de la pequeña mano, era como si no midiera su fuerza y eso para RG era extraño, jamás alguien le había tomado de esa forma.

-Hola, niñas- dijo Mono -¿Cómo están?

-Bien- respondió RG -estábamos esperando a Seven ¿Tu también?

-Si- dijo el chico mientras se reacomodaba la bolsa de papel y sacaba un trozo de papel de libreta, denotado por las líneas azuladas tan icónicas de las mismas -me dejó esto en mi asiento.

RG sacó el suyo de igual forma, también Six, todos decían lo mismo pero con el nombre del inicio cambiado para cada uno de los citados, la diferencia es que el papel de RG era más largo, siendo que esta indicaba una serie de materiales y objetos que tenía que traer y que c¿guardaba en el saco:

"... , tengo que hablar contigo y con los otros dos. Los espero en la banca del patio del recreo, espero que ya hayan comido para entonces."

"-Seven."

-Bueno, debe ser importante si hizo esto para todos nosotros- dijo Six para si misma, sin esperanza de que alguien le escuchara.

-¡Así es!- que mala suerte -¡Estoy feliz de que hayan venido!

Seven entonces apareció por las espaldas de las chicas, Mono no dijo nada para no interrumpir mientras el chico de exagerado flequillo hacía brincar del susto a RG.

-¡Rayos, Seven! Al menos avisa sin gritar- El niño rio un tanto apenado pero sin intenciones de contenerse.

-Lo siento, RG- contestó con la mano sobando su propia nuca -pero no hay tiempo que perder ¡Síganme los buenos!

-Espera ¿Por qué nos trajiste aquí si íbamos a otro lugar?- preguntó Mono

-¡Buena pregunta!- contestó Seven -te lo digo cuando tenga la respuesta

El trío siguió al entusiasmado niño hasta las escaleras de la escuela, se detuvieron de vez en cuando porque Seven no paraba de mirar de un lado a otro, como si sospechara de su propia sombra, de su entorno, de miradas curiosas e impertinentes. Parecía que no había moros en la costa, así que siguieron su camino hasta llegar al segundo piso. Seven les indicó al resto con su dedo en sus labios que guardaran silencio, especialmente porque la sala de maestros estaba precisamente al lado de las escaleras.