30: El ChaosBot

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- Es hora doc - informó colocando su traje de batalla, era más majestuoso que el original, está vez era de un tono negro brillante, que combinaba perfecto con ella, lentamente sus ojos se situaron en un espacio vacío, intentando recordar cada fase necesaria para triunfar.

- Lo sé Beck, lo sé - afirmaba con entusiasmo instalando las últimas mejoras en su arma final - tendrás en tu sistemas los movimientos de esas ratas, sus jugadas, todo - informaba como si la maquina pudiera oírle - no falles, creación mía, no falles y el mundo entero será nuestra recompensa.

Los ojos de la enorme construcción de metal se extendieron, y luego comenzó a alzarse delante de todo, se podría decir que tuvieron algo de miedo al inicio, pero ahora no, era una creación majestuosa, incluso el color le quedaba bien.

- Adelante ChaosBot, encargate de eliminar a todos nuestros enemigos.

...

Un zumbido en sus orejas le impedía escuchar todo lo que sucedía a su alrededor, intentaba abrir sus ojos, pero mientras más lo buscaba, la deslumbrante luz solar se lo impedía, ocacionando que la migraña se añadiera a su lista de problemas.

No podía sentir el resto de su cuerpo, sólo sentía el dolor, intentó mover sus brazos, pero ellos al parecer no respondieron, después siguió con las piernas, y una vez más su resultado fue el mismo; nuevamente buscó abrir sus ojos pero el dolor en su cabeza era más punzante cuando lo intentaba, finalmente se dejó vencer esperando que, dentro de poco, su captor la liberara de esa prisión y pudiera recobrar la conciencia.

Lo único que sintió después fue el como todo su peso se venía abajo y luego se azotaba contra lo que parecía ser el suelo, aunque bien podía ser una estructura de metal, no lo sabía.

Pudo recobrar un poco sus sentidos, ahora podía abrir un poco sus ojos, divisó su mano izquierda frente a su rostro, luego, unos pasos más adelante observó una extraña bota negra -"Keip" - se dijo en su mente intentando ponerse de pie, pero no podía, sus manos aún pesaban y sus piernas no querían ayudar.

El dolor nuevamente le ganó haciendola caer en un profundo mareo, lo que la llevó a desmayarse nuevamente, aunque quizá no fue eso, el desmayo pudo haber sido ocasionado por el impacto de una enorme roca en su cabeza.

- ¡¿Qué te sucede?! - fué lo último que escuchó antes de dejarse mecer en su sueño.

" Quizá es hora..." se dijo a si misma mientras no luchaba por despertar.

- ¡¡Puedes matarla!! - regañó a su acompañante mientras corría hasta la eriza y la tomaba en sus brazos, su nuca sangraba y su cuerpo estaba algo frío, pero colocó su mano debajo de la nariz y lo sintió.

- ¿Algún problema con eso? - cuestionó ella con los ojos entre cerrados, examinando si era Keip o Adam con quien hablaba ahora - ese es el objetivo de nuestra misión - le recordó haciéndolo ponerse en pie.

- Tienes razón - contestó a regañadientes con algo de rabia, luego la dejó ahí y se dieron la vuelta - El robot esta aún en proceso para ser re-armado, pero ella logró abrir las cápsulas.

- ¿Seguirán ahí? - preguntó al aire mirandolo con decepción al ver que no estaba haciendo algo al respecto - Por dios, ve por ellos - ordenó haciendo énfasis en cada palabra, el grisáceo la miró, luego desplazó su mirada a la eriza, y después decidió volar.

- Muy bien, Amy Rose, tú y yo nos vamos a divertir mucho - agregó sobre ella, poniéndola boca arriba con ayuda de su pie derecho.

...

- ¿Dónde está? - preguntaban con algo de miedo, ya había pasado mucho tiempo y no veían rastro alguno de Amy, Shadow o alguno de los chicos.

- Ya deberían estar fuera - musitó Rouge mordiendo sus uñas, todos lo sabían, pero era difícil de admitir, algo había salido mal.

𝙽𝚎𝚠 𝚁𝚞𝚕𝚎𝚜 𝟸 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora