3: La orden

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-Ylenia

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-Ylenia...

Fred observó su nuevo corte de cabello, se veía tan linda. Sus emociones dieron un vuelco, volvió a sentirse vivo, verla de nuevo lo hizo sentirse vivo.

No sabía como ella iba a reaccionar, que diría o haría. Pero, ver de nuevo sus ojos color cacao, hizo que sintiera cosas en su estómago.

-Te dije que te fueras- Remus intentó sacar a Fred de la casa, pero ella lo detuvo.

-Está bien, papá- sonrió con suavidad, aunque por dentro se estuviera muriendo -. Tengo que devolverle algunas cosas...

-¿Segura? Yo pued...- su padre habló, pero ella lo interrumpió por segunda vez consecutiva.

-Está bien, dije- miró al pelirrojo de arriba a abajo
-. Quédate aquí con él, yo iré por las cosas- Ylenia desapareció lo más rápido con pudo. Sentía como su corazón latía con demasiada fuerza. El nerviosismo, el dolor, el enojo, todo se le había juntado.

Fred miró a la chica que venía desde las escaleras de la casa, él aún se encontraba en la entrada con Remus. Se le veía tan bien ese corte de cabello, Merlín, estaba lindísima, también pudo notar que estaba más delgada que la última vez que la vio, hará unos 3 meses y medio.

-Déjanos solos, papá.

El hombre lobo miró con desconfianza al pelirrojo, dio un suspiro y se fue hacia la cocina para dejarles intimidad, él no sabía que había pasado entre ellos dos, pero si ella estuvo así de mal, nada bueno había hecho Fred.

Ylenia tosió, se acercó y estiró los brazos para que Fred pudiera agarrar la caja llena de sus cosas, al menos, las que se habían salvado de ser quemadas.

El Weasley agarró la caja, no muy seguro porque no sabía lo que había dentro, estaba confundido.

-Oh...— la castaña recordó algo. Metió la mano en el bolsillo de su peto y sacó un anillo, lo dejó encima de la caja que él sostenía -Está casi todo.

-¿Qué... qué es esto?

-Tus cosas- sonrió suavemente, no quería mostrarse débil ante él después de lo que le hizo -, las que faltan son porque... bueno, las quemé- mala elección al decir eso.

-¿Quem... quemaste nuestras cosas?

-Tú y yo no compartimos nada- dijo, demasiado de segura de sus palabras. Fred se quedó unos segundos mirando el anillo de compromiso que Ylenia le había devuelto, estaba justo enfrente de sus ojos, encima de la caja -, ahora vete, por favor.

-Ylenia...- Ella ahora no soportaba que la llamase así, o de cualquier manera -. Tenemos que hablar...

Soltó una risa irónica -No tengo nada que hablar contigo.

-Tienes que escucharme- replicó -, tienes que saber como fueron las cosas.

-No me interesa- de rascó el cabello, algo nerviosa y comenzando a irritarse -, largo.

Perfidia || FW || +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora