50: Licor de Sandía

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-¿Tú estás segura?- pregunta, jugando con sus dedos cuando la familia de la chica entra a la casa, dejándolos solos en la jardín de la casa de Ted Tonks

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-¿Tú estás segura?- pregunta, jugando con sus dedos cuando la familia de la chica entra a la casa, dejándolos solos en la jardín de la casa de Ted Tonks.

-Sí, no- duda ella -, no sé- suspira, apretando la mano de Fred -. No quiero atrasarlo más, Fred...

-Es tu decisión, lo que tú digas es lo que haremos.

Ylenia vuelve a coger aire para luego echarlo por la boca, negando con la cabeza.

-Sí, se los quiero contar, pero ahora no- dice -, he visto a mi padre muy bien contigo hoy, dejémoslo estar así, haremos una cena o algo, para que también esté tu familia, y se lo diremos a todos juntos- explica -. ¿Te parece buena idea?, ¿o prefieres hacerlo con las familias por separado?

-A mi no me importa, los dos están bien, lo que tú quieras- dice Fred -. Al fin y al cabo, nos conocemos entre todos, no importa si es juntos o no.

-Entonces que sea juntos- decide la castaña -, así mi padre tendrá menos oportunidad de pegarte, no creo que se atreva con tu familia delante..

-Eso no va a parar a Remus, cielo- ríe, y ella cierra los ojos, suplicante.

-Esperemos que sí- murmura mientras oye a su familia acercarse, con copas y botellas de vino.

-¿Qué queréis?- pregunta Remus, sentándose al lado de su hija -. El abuelo tenía de todo en la bodega.

-¿Qué estás bebiendo tú?- le pregunta la menor a su madre, que sube su copa y sonríe.

-Es licor sin alcohol, ¿quieres?

-¿De qué es?

-Sandía.

-Hm- Ylenia asiente, y su madre le indica que la siga. Antes de levantarse, deja un beso en la mejilla de Fred y susurra: -. No tardo, grita si mi padre te quiere matar.

El chico ríe e Ylenia se marcha detrás de su madre, oyendo a su abuelo decir;
-Fred, muchacho, bebe lo que quieras, estás en tu casa.

Al llegar a la cocina, Ylenia aún observa a su pelirrojo, podía verlo por la gran puerta que daba al jardín. Estaba hablando con su abuelo, desde que Ted lo conoció, el Weasley le cayó fenomenal, al igual que su hermano George.

Y he de resaltar, que Ted invitaba más veces a Fred a su casa de las que lo hacía con Remus. Y eso al Lupin le molestaba un tanto.

-El abuelo quiere mucho a Fred- su madre habla, llevándose toda su atención.

-Fred también le tiene mucho aprecio- sonríe, observándoles una vez más para luego mirar a Tonks -. ¿Qué tal el embarazo?

-Bien, la verdad- sirve el licor de Ylenia y se lo entrega -. Yo siempre he sido de pocas náuseas y vomito- explica -, sólo me entra mucha hambre, me como lo que pille, lloro por tonterías y tengo.. bueno, mucho apetito sexual- Ylenia ríe al oír aquello último. -. Supongo que es hereditario... porque aún no he visto que hayas tenido náuseas o vomito.

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