Soy libre

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- ¿Entonces? ¿Qué te ha parecido? – Sus ojos estaban muy abiertos, atenta a la reacción de su amiga.

La rubia la miraba sin poder disimular su asombro.

-Val, ¿estás segura de que quieres hacer esto? ¿y de esta forma? –

- ¿De qué otra forma podría ser? – Preguntó, dándose la media vuelta para recargar sus brazos sobre la barra de la cocina.

Isabella rodeó el sitio hasta quedar frente a ella.

-Esto es muy apresurado Valentina, ¿Qué te ha dicho Alejandro? –

-No ha dicho nada, porque mi relación con él terminó el día de ayer. - su voz sonaba tranquila, pero solo era pura apariencia.

- ¿Cómo has dicho? - interrogó inmediatamente la editora.

-Lo que has escuchado – se encogió de hombros, quitándole importancia a la situación, como si de eso no dependiera su carrera como actriz – No podía seguir trabajando con él, no tenemos los mismos ideales, además de que es un maldito homofóbico, yo necesito a alguien que me apoye y me respete, no a una persona que al darme la vuelta comenzará a juzgarme. –

- A ver Val, ¿piensas hacer esto sin alguien que te apoye con la prensa?, estas dejando tu carrera a la deriva - se acercó hasta tocar el hombro de su amiga y ese gesto hizo que la actriz la mirara fijamente Sé lo que estas pasando, el acoso que ha tenido que vivir Juliana desde que se enteraron sobre su orientación sexual ha sido horrible. Pero nada tienes que ver tú ahí. -

- Quiero hacerlo antes de que la prensa se entere y tenga que orillar a Juliana a mentir nuevamente, quiero hacerlo Isa, es el momento – Sonrió de manera suave y ese gesto logró tranquilizar un poco a la rubia.

- Esta bien Val, si ya lo decidiste te voy a apoyar, pero por favor antes de soltar esta bomba, necesitas un mánager con urgencia –

La actriz se movió de lugar hasta alcanzar su bolso, que se encontraba encima de su cómodo sofá, comenzó a buscar hasta que dio con una tarjeta y se la llevó a su amiga.

-No te preocupes, he solucionado eso. Esme me pasó el contacto de Renata, es muy buena en lo que hace, así que antes de concluir mi relación con Alejandro acudí a ella y le conté absolutamente todo, me ayudará con esta situación, así que no tienes que preocuparte. – Quería creerse sus propias palabras, pero le costaba hacerlo, sabía que el paso que estaba a punto de dar era uno muy grande, y estaba sobre arenas movedizas donde nada era seguro.

- Muy bien Val, eso me tranquiliza muchísimo, y bueno, ¿Cuándo darás a conocer la noticia? ¿Qué pasa con el proyecto que tenías en New York? -

- El comunicado, debe pasar por las manos de Renata, ella le dará el visto bueno, y si todo se ve bien, mañana temprano lo publicará-. Suspiró lentamente, acción que no pasó desapercibida para la rubia.

-Val, todo estará bien, y aunque no lo esté, no puedes seguir viviendo en una mentira, si tu publico te ama, te tendrá que aceptar tal cual eres, sin máscaras, siendo tan maravillosa como siempre. –

-Solo quiero que Juls sea feliz, no importa lo que me pase a mi o a mi carrera, no quiero que vuelva a mentir por mí nunca más. – Los brazos de Isabella estaban sobre ella, y aunque estaba tratando de ser fuerte, no pudo evitar derramar unas lágrimas.

-Val, cuanto daría porque fueras feliz, que toda esta situación se acabara y lucharas por el amor de tu vida. – dijo, sin soltar a la ojiazul.

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