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—¿Y porque no me dijiste? —pregunta su mamá, Mara.

—¡Porque estabas trabajando, ma! Además, solo es un amigo —respondió, enfatizando la última frase mirando a su hermana, que resultaba ser una soplona.

Akira le dijo a su mamá, que Samuel había traído a su "novio" a la casa. Y que durmieron juntos —pero obviamente no pasó nada, por mucho que todos nosotros quisiéramos—.

Y ya conocen a los boomers, sobrepiensan todo, apesar de saber que tal vez nada pasó. Pero supongo que es instinto maternal.

La mamá de Samuel nunca pasó por eso; que su hijo trajese chicos o chicas a su casa, y que se lo ocultase. Apesar de que ella en sus años de juventud, lo hacía a menudo. Y vaya que tuvo problemas con sus padres por eso.

Suspiró, para luego decir;

—Sí es solo tu "amigo" ¿Porque no me dijiste? —pregunta.

Samuel se queda procesando la pregunta. Sabía que la perfecta respuesta para ella, era un "no sé", porque el menor no tenía ni idea de porque no le dijo. Cuando sabía que ella iba a aceptar.

Mordió su labio inferior algo ansioso. Quería responderle, pero sabía que de su boca saldría un "no sé", y también sabía que esa respuesta no cumpliría con las expectativas de su mamá.

—Vale, digamos que solo fue por un proyecto, pero la próxima vez, me dices, ¿Va? —dice, y eso tranquilizó a Samuel; porque no tendría que decir una respuesta estúpida, aunque fuese honesta.

—¡Mamá! ¿Él puede traer chicos a la casa, pero yo no? —reprocha Akira.

—¿Quien dijo que no podías traer chicos a la casa? Solo te digo que tengas cuidado Akira, pero no significa que no puedas traer uno —responde con su típico tono de calma.

—Oh... —musita algo sorprendida por la respuesta de su madre, esperaba un "no pero Samuel es más responsable" o "confío en Samuel, y sé que no hará nada malo".

Y apesar que su mamá sentía angustia por Akira, sabía que era una etapa normal de adolescente. Y quiera o no, no podía hacer nada.

Y aunque fuese difícil de creer, también estaba algo angustiada por Samuel. Porque ya tenía cierta edad, y ya saben, no quería nietos a tan temprana edad, ¿Entienden?

Pero si es un chico, no debía preocuparse por ése aspecto, ¿No?

Aunque no era solo eso, no quería darle una charla sexual a su hijo. Para ella, eso era simplemente asqueroso; pero debía hacerlo, porque ella era la madre, y es una de sus responsabilidades.

Suspiró, para luego despeinar el cabello del azabache, y darle un besito en la frente, e irse a su habitación, esto de ser mamá luchona no es fácil, eh.

Mientras que Samuel, suspira aliviado, porque pensaba que iba a ser peor, pero no fue así. Y debería agradecerle al de arriba por eso.

Suspiró, y luego se quedó mirando a Akira, quien le miraba con cierta curiosidad en sus ojos.

—¿Pensando en tu novio? —pregunta sarcástica.

Frunce el ceño.

—¡No es mi novio! —responde.

Akira comienza a soltar carcajadas. Mientras caminaba hacia su habitación. El simple hecho de que su hermano no acepte sus sentimientos hacia el chico castaño, se le hacía muy gracioso. Apesar que en esos casos, ella se veía igual, o peor.

Y cuando digo "sentimientos", hablo de que tal vez le guste, aunque Samuel no esté seguro; sabía que en algún momento dado, le iba a gustar.

Y eso le daba miedo, porque sabía que él no le iba a gustar a Rubén.

son pololos ➹ rubegettaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora