Insatiable

Miedo.

-Muy bien... ¿falta alguien?

Pregunta Michelle, en una reunión del CNI.

-Solo Dan y Fred- contesta Volkov.
-¿Aquí también vamos a usar sus falsos nombres?- pregunta de nuevo Michelle.
-No es necesario- contesta Conway.
-Está bien, ¿alguna razón para su ausencia?
-Están en una investigación.
-¿Qué investigación?
-En una no autorizada.

Dice el ruso cruzándose de brazos.

-No empieces, Volkov. Están bien.
-No iban preparados.
-Confía un poco más en tu marido.
-Confío en mi marido pero no en su preparación ni en su compañero.
-¿Estás poniendo en duda la preparación que les he dado?

Se miran en silencio.

-Pues muchas gracias.
-No quería decir eso. Está preparado pero no para estas cosas, no tan... improvisadas.
-Víktor, querido, cálmate- añade Michelle- Si los ha mandado Jack, es que están completamente capacitados. No temas por ellos.
-No teme por ellos. Teme por él, no confía en Gustabo- comenta Freddy.
-¿Por qué no?
-Porque no, es inestable y muy impulsivo.
-Dejad en paz a Gustabo.

Habla Jack; todos le miran.

-Es de mis mejores agentes y confío plenamente en él. En ellos. Y os debería de bastar.

Tira sus gafas a la mesa y se cruza de brazos.

-Confío en ti, Jack,- habla Volkov- pero como le pase algo a Horacio, no me lo voy a pensar.

Se miran en silencio y el mayor suspira.

-Venga, señores. Prosigamos- interrumpe Michelle.

——

Cinco minutos después, la radio de Jack suena en la habitación, haciendo callar a todos.

-¡Conway! ¿Conway, me escucha?
-¿Horacio? ¿Qué pasa?

Volkov se levanta deprisa del asiento.

-¡Horacio!
-H-Han disparado a Gustabo. Dos veces. Lo estoy llevando al hospital, ¡venga, por favor!

Se le escucha llorar.

-Vamos para allá, no te preocupes. ¿Tú estás bien?

Silencio.

-¡Horacio!- grita Volkov- ¡Solntse, responde!
-Estoy bien... estoy bien, Vik. Pero Gus no.

Todos se miran y los dos mayores cogen sus chaquetas.

-Ho... Horacio...
-Eh, eh, Gus, mírame. ¡Mírame! ¡Gustabo! ¡Mírame! ¡Joder!

La radio se corta.

-Vámonos, ¡ya!

Ordena Conway y todos salen corriendo hacia el hospital.

——

Minutos después, tanto ellos como Horacio llegan al mismo tiempo.

-¡Un médico, por favor!

Grita Horacio cargando a Gustabo en brazos.

-Dame, ve a buscar un médico.

Dice Conway y Horacio le pasa el cuerpo.

Corre junto a Volkov por todo el hospital buscando un médico.
Jack mira a Gustabo con el corazón en un puño y sin poder articular palabra.

-Gustabo- le llama- Eh, Gustabín... vamos, joder... no nos hagas esto...

Agacha la cabeza hasta juntarla con la de Gustabo.