ᴛᴏᴋʏᴏ ʀᴇᴠᴇɴɢᴇʀꜱ ᴛ/ɴ || ꜰᴜᴇʀᴢᴀ

ᴄᴀᴘɪᴛᴜʟᴏ 2

-Te h-hecho de me-menos hermanito. -dije llorando en voz baja.

-¿Quién? -oí una voz.

Me giré asustada con los ojos llorosos y miré a un chico que me estaba mirando desde abajo.

-¿Que te pasa? -inclinó un poco la cabeza hacia la derecha.

Me limpie rápido las lágrimas de la cara, pero no paraba de llorar. Me puse el brazo en la cara intentado tapar mi rostro.

-N-nada. -dije llorando.

-Mentira. ¿Puedo subir? -me preguntó.

Asentí con la cabeza y el chico subió, se sentó detrás mío. Después de todo aquel parque no era mío.

-Si quieres, puedes contarme, yo no diré nada. -sonrió.

-N-no, no te quiero molestar con mis h-historias. -seguía llorando.

-No me molestas tranquila. -sonrió. -Siempre intentado ayudar a la gente, aunque no la conozca de nada.

-¿S-seguro?

-Sip. -dijo riendo.

No se porque pero ese chico me transmitía confianza, asi que cogí aire para poder dejar de llorar y le conté todo lo que me pasó.

Le expliqué todo lo sucedido el día anterior y el día de hoy. El como me había defendido antes aquellos tipos, el como rechazé la ayuda de dos chicos y el como un chico que no conocía de nada se coló en mi casa por la noche.

El chico sentado detrás mío me empezó hacer preguntas para intentar ayudarme, yo respondí a cada una de ellas.

Hacía tiempo que no tenía una conversación así. No se porque pero me sentía muy cómoda hablando con el. Me agradaba. Me hacía sentir segura, no se cómo explicarlo.

-Entonces... ¿has quedado con el para que el sepa tu respuesta? -me miró

-Emm... Bueno si... Me dió un papel con un lugar y fecha, me dijo que estuviese allí al de una semana.

-No vallas. -me dijo serio volviendo a mirar al frente.

-¿Enserio, eso crees? Bueno, si... Yo no iría, pero ya saben donde vivo y...-me interrumpió.

-Hay algo que no te he dicho. Yo... soy el líder de una de las pandillas más importantes de Tokyo.

-¿Eh?

-Soy líder de la pandilla llamada "Touman"

-Espera... ¿que?

¿Lo dice enserio? ¿Ahora no solo tengo que lidiar con una pandilla, sino con dos? No, definidamente no, no quiero, no después de lo que le pasó a mí hermano.

-Verás... Tengo un hermano 10 años mayor. -cambió de tema.

-¿10 años mayor? Casi igual que mi hermano... -pensé.

-Aunque ya murió. -me sorprendí.

Esto... solamente es casualidad, ¿no?

-El... era muy temerario. No le importaba pelearse con tipos más fuertes que él. -me empezó a explicar. -Hoy en día la gente piensa que los delincuentes son patéticos. Cuando mi hermano vivía, esto estaba lleno de pandillas de motociclistas. Sus motos rugían por doquier. -me miró sonriendo. -Todos eran tipos rudos. Se la pasaban peleando... Pero siempre se hacían cargo de sus problemas. -de repente cambió la expresión de su rostro. -¿Que tiene eso de patético? -miró al cielo estrellado. -Por eso quiero crear una nueva era para los delincuentes.

Todo lo que me dijo anteriormente de lo de ser el líder de esta tal pandilla llamada "Touman" se me olvidó totalmente.

En cambio, empezé a pensar en mí hermano mayor. La historia de su hermano era parecida a la de mi hermano. Mi hermano era 11 años mayor que yo. El también era un delincuente, pero aún siéndolo, aún perteneciendo a una pandilla, era la mejor persona del mundo, y... por mi culpa, murió.