My first & last ↬ Markhyuck [NCT]

Capítulo 26

Los siguientes días fueron pasando con normalidad, o más bien llenos de emociones para Donghyuck porque ciertamente jamás había tenido una relación oficial como lo tenía con Mark, entonces era sorprendente encontrarlo fuera del colegio esperándolo para ir juntos a casa, o cuando llegaba de repente a su hogar invitándolo a salir. O incluso cuando le enviaba mensajes de buenas noches cuando él estaba a punto de irse a dormir.

Estaba sorprendido, pero sentía que podía acostumbrarse a ese trato tan sentimental.

—No, no Lin —Ten negó con suavidad mientras hacía que la menor alzara sus brazos con elegancia. —Así tienes que hacerlo. Con suavidad mientras levantas tu pie derecho... así... ¡Bien!

—Ahora, tú Jian debes tomarla de la mano y hacerla girar —Sicheng dijo con tranquilidad y todos rieron cuando el menor hizo una mueca.

—¿De verdad debo tomarle la mano? ¡Maylin se saca los mocos! —el menor la acusó y la niña enseguida se avergonzó y corrió de inmediato escondiéndose en el pecho de Renjun quien estaba sentado en el suelo esperando a que el ensayo de sus hermanos terminara. A su lado estaba sus amigos lo acompañaban porque realmente no tenían nada mejor que hacer.

—Jian —el hermano mayor lo regañó con voz severa mientras acariciaba el cabello de la niña que no quería mostrar su rostro por lo avergonzada que estaba. —Ahora Maylin es una niña grande, ¿verdad que sí, mi amor? —preguntó tomando el rostro de su hermana y haciendo que lo mirara.

Eso fue suficiente para que ella asistiera con la cabeza y mirara indignada a su hermano. —¡Es cierto! Ya soy grande, tengo 5 años y ya no me como los mocos. Y yo tampoco quiero tomarte de la mano porque tú te tiras pedos.

—¡Hyung! —Jian gritó indignado soltándose de Sicheng quien lo estaba ayudando a ensayar y caminó con pasos enojado donde estaban sus dos hermanos.

Donghyuck pensaba que aquello era digno de una película de comedia porque ambos hermanos pequeños comenzaron a discutir sacando todas sus verdades mientras que Renjun intentaba detenerlos. Incluso los dos entrenadores parecían divertidos con la discusión que ambos menores estaban llevando a cabo.

—¡Entonces cuéntale a Renjun hyung que tú te comiste las galletas que era de él!

—¡Pero tú me las sacaste de la alacena!

—¡Porque eres muy pequeña y no alcanzas!

Renjun hastiado rodó los ojos, alzando sus manos y tomando respectivamente la oreja de ambos haciéndolos callar automáticamente, pero comenzaron a lloriquear por el dolor.

—Basta los dos, ¿acaso no les da vergüenza discutir estas cosas frente a los entrenadores y los demás? ¿Creen que es muy bonito que se enteren de las cosas que hacen en casa? Los demás no querían saber si Maylin se saca los mocos o si Jian se tira pedos. Ahora pidan unas disculpas a todos porque están molestos por su actitud de niños caprichosos.

Y todos los demás como buenos actores fingieron seriedad y molestia para no contradecir las palabras de Renjun mientras que ambos se giraban hacia ellos con vergüenza.

—Lo sentimos —hicieron una reverencia sin siquiera mirarlos. —No volveremos a discutir.

Donghyuck admirando cada detalle en ambos pequeños, hubiera deseado que alguien estuviera con él cuando comenzó a crecer. Le hubiera gustado tener a alguien en quien confiar o que alguien lo regañara por las cosas estúpidas que hacía durante su entrada a la adolescencia. No tuvo a nadie, nadie le enseñó cómo debía hacer las cosas, como formarse y su única figura materna solo se dedicaba a regañarlo por cosas mínimas como que había sido visto en la calle con chicos desconocido fumando, o cosas que claramente eran falsas. Hubiera deseado firmemente tener a alguien como Renjun en su pasado, porque nunca tuvo a nadie a quien llorarle por sus rodillas heridas o porque no alcanzaba la alacena. Ahora, era donde podía darse cuenta de lo mucho que necesitó todas veces a alguien que lo acompañara en su camino de la vida.