𝐃𝐢𝐨𝐬𝐚 𝐃𝐞𝐥 𝐎𝐫𝐠𝐮𝐥𝐥𝐨 || 𝑆ℎ𝑢𝑢𝑚𝑎𝑡𝑠𝑢 𝑁𝑜 𝑉𝑎𝑙𝑘𝑦𝑟𝑖𝑒

Reunión

El día de la reunión había llegado, las deidades principales se encontraban en la misma habitación con el propósito de debatir sobre la decisión que Zeus había tomado. Algunos molestos se encontraban con un semblante serio y uno que otros quejidos, otros se habían tomado todo tranquilo o incluso estuvieron de acuerdo; por otro lado se encontraban los meros curiosos como Loki y Ares que no iban a opinar como tal pero querían estar en contexto de todo o no perderse del entretenimiento de las discusiones.

Era milagro ver a la deidad suprema de los nórdicos Odín estar presente que a cualquier oportunidad prefería enviar a su hijo como su representante pero sintió que lo mejor era hacerse presente dada las decisión tan drástica y sorpresiva que se tomó. Poseidón jugaba con su cabello rubio sentado en uno de los sillones cercano a uno de los grandes muebles con un rostro desinteresado, la diosa Nihil se encontraba sentada plácidamente en sus piernas platicando con Loki quien se carcajeaba sin parar. Zeus parecía un pequeño niño entrelazando sus dedos de los pies y con la mirada baja risueño, recibía múltiples ofensas de parte de Shiva quien de cuando en vez se levantaba de golpe por la ira. Thor miraba por una de las ventajas recibiendo en su rostro serio al igual que el de su padre los rayos de luz de aquel día. Ares y Hermes compartían palabras para al final terminar su conversación con una mirada desafiante y una tensión única como siempre.

-Lo único que espero anciano es que tengas una buena razón para haber suspendido el Ragnarok- Agrego Shiva- y que tengas bien en claro que tanto tiempo planeas suspenderlo.

-¿Tiempo?- Respondió el dios de los dioses con una risa al final de su pregunta.

-Debí haberte matado cuando me impediste pelear- Se levantó Shiva de su asiento más exaltado aun y de dos pasos quedo solo a metro y medio de Zeus.

-¿Estás seguro que lo hubieras hecho?-La forma corporal de Zeus cambio para dar pasos a unos musculosos brazos y un gran tamaño con el cual retaba a Shiva devuelta.

-Chicos por favor, no es momento para pelear y menos aquí. Admito que sería divertido y es un cuarto enorme pero esperen a salir de aquí- Se levantó la peliblanca de las piernas del dios del mar para colocarse en medio de ambos hombres, sus delicadas manos se posaban en sus pechos trabajados- Si por su culpa mi vestido blanco se ensucia me veré forzada a destruirlos a ambos.- Zeus en automático volvió a su forma habitual tomando las manos de la diosa delicadamente y devolviéndolas a su lugar inicial teniendo en cuenta de lo capaz que era. Shiva no reacciono al instante una vena en su frente se asomaba y su mandíbula estaba tan tensa que podía desencajarse en cualquier momento, miro los grandes ojos de la peliblanca que lo miraban con una expresión de pregunta y retadora y tomo asiento casi rompiendo el mismo, solo recibía dicha orden por el cariño que tenía por la diosa y la amistad tan unida que mantenían.

-¿Podríamos dejar de perder el tiempo con discusiones infantiles y finalmente darle inicio a esta reunión?- Agregó Poseidón.

-Podría estar aquí todo el día- Dijo el dios del engaño revoloteando por todo el cuarto de cabeza.

-Claro, no es como que tengas mucho que hacer- Le respondió Ares en forma de burla.

-Cierto, pero por lo menos no paso todo mi día llorando. Debieron de cambiarte el puesto a la deidad del llanto o algo así, estas muy cerca de ser un humano sentimental cualquiera- Loki se colocó cerca del rubio risueño como un gato para desaparecer al instante cuando Ares trato de tomarlo con sus grandes brazos para atacarlo. Hermes solo podía reir por lo curioso del momento.

En otro lado Lafne caminaba apresurada directo al cuarto de su abuelo, sabía que la reunión se estaba realizando. Realmente no le importaba interrumpir, de todos modos su abuelo le pidió que se hiciera presente ya que después de la misma debía tener una conversación con ella. Se detuvo detrás de la puerta doble y tomo dos bocanas de aire antes de abrirla con ayuda de su habilidad, podía sola pero tenía vagancia ese día. No sabía quiénes se encontrarían en dicha habitación pero solo se esperaba caras conocidas. Abrió la puerta finalmente, su luz deslumbraba el lugar aún más de lo que estaba por el sol de aquel día, lo primero que ve al momento de que las puertas se abren de par en par es la cabellera de color cereza de Thor, quien al escuchar las puertas abrirse se dio un poco la vuelta para verle, sus ojos amarillos eran eléctricos y Lafne sintió un choque en su columna cuando se miraron fijamente. El terminó de darse la vuelta para verla atentamente, sus ojos la miraban de arriba abajo, la pelinegra apenas podía moverse o respirar por los nervios y su rostro estaba tan rojo que se podía ver a kilómetros.