Indignación

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"Con esto concluye la cuarta batalla del Ragnarock y parece que Jack el destripador es nuestro ganador..."

Cuanto sentimiento de vacío, cuanto dolor incomprendido. Los ojos de Jack miraban la nada del cielo oscuro de la arena sin ningún propósito en absoluto, los guantes de sus manos se desvanecieron en un abrir y cerrar de ojos adoptando la forma de la Valquiria que le ayudó durante toda la batalla en la cual había sido ganador.

Los ojos de la delicada Valquiria lo miraban con furia, esta estaba bañada de sangre la cual se había oxidado y ahora portaba un color rojo vino. Jack la miro con una sonrisa tierna.

—Bueno, nos volveremos a ver damita... ¿Estas bien?

—Hmmm. —La pequeña se cruzo de brazos.— Soy yo quien debería preguntarte eso ¿Cómo se siente matar a un Dios?

La sonrisa calidad del peliblanco desapareció ante esas palabras, miro sus manos y con la mirada en lo más alto del cielo agregó:

—No lo sé, es una sensación misteriosa— Ciertamente lo era, había ganado y había permanecido con vida a pesar de todo pero no se sentía totalmente satisfecho de sus actos.

—¿Ah sí?— El rostro de Hlokk era de pura molestia, realmente esperaba que aquel humano se sintiera orgulloso de sus actos. Aparentemente había perdido el tiempo y se había ensuciado en vano, aunque ciertamente no tenía opciones a elegir— Así que no puedes expresar tu tristeza ¿Verdad? Tú realmente eres un alma que da pena.

—¿Lo soy?

—¡¡Ey, es tu culpa que la adorable y pequeña Hlokk este bañada en sangre!! —La pequeña comenzó a flotar alejándose lentamente de la arena—Dios, mejor debería ir a tomar un baño. Deberías dirigirte a la enfermería ¿Entendido niño?

—Yes, madame.

Jack emprendió camino, un camino lento, forzoso y pausado directo a la salida. Su cuerpo se balanceaba de un lado a otro resultado del esfuerzo y el cansancio de su cuerpo humano, su mente era un remolino de sucesos pasados. Recuerdos de las frases de Hércules y su color aparecían uno tras otros, tan vividos como si los estuviera viviendo en ese instante.

"Responderé a tu determinación con todas mis fuerzas" "Te salvare de tu sufrimiento" "Nunca lo olviden yo siempre amaré a los humanos."

Realmente Hércules lo salvo por un microsegundo le otorgó la conformidad que tenía años sin sentir, con la gracia de su color le recordó lo que se le fue arrebatado aquella vez de pequeño.

En la altura, en los balcones Lafne continuaba estática sin moverse un centímetro viendo como aquel saco de huesos con piel trataba de mantenerse en pie. Ella sabía que Jack estaba destruido en su interior y sabía que sí le permitieran morir o olvidar lo antes hecho lo tomaría sin pensar. El peliblanco tomó su sombrero el cual se encontró a medio camino colocándolo en su cabeza.

—Si pudiera pedir un deseo yo... Desearía poder verte una vez más.

Lafne estaba tan enfocada en Jack que no vio como la primera piedra se aproximaba. Sus ojos verde se abrieron como platos cuando una de estos objetos contundentes choco con la espalda del peliblanco haciéndolo perder el balance y sus mejillas se tiñeron de rojo pero por la ira.

—¿Que tan ingratos tienen que ser los humanos para atacar a quien les ha dado la oportunidad de vivir un momento más?

—¿Te sorprende la escencia del humano? Pensé que ya la conocías... El humano es tan sentimental que no se rigue de sus propios criterios, básicamente Hércules era un traídos para ellos y aún así lo idolatraban por la devoción y amor que le tenían. Jack por otro lado es una pobre alma en pena, sus actos fueron los resultado del mismo comportamiento humano maldito y aún así lo juzgan. —Agregó Loki risueño.

𝐃𝐢𝐨𝐬𝐚 𝐃𝐞𝐥 𝐎𝐫𝐠𝐮𝐥𝐥𝐨 || 𝑆ℎ𝑢𝑢𝑚𝑎𝑡𝑠𝑢 𝑁𝑜 𝑉𝑎𝑙𝑘𝑦𝑟𝑖𝑒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora