𝐃𝐢𝐨𝐬𝐚 𝐃𝐞𝐥 𝐎𝐫𝐠𝐮𝐥𝐥𝐨 || 𝑆ℎ𝑢𝑢𝑚𝑎𝑡𝑠𝑢 𝑁𝑜 𝑉𝑎𝑙𝑘𝑦𝑟𝑖𝑒

El Siguiente.

Geir estaba furiosa su alma estaba rota por otra pérdida pero en esta ocasión la ira la invadía, no existían lágrimas ni expresión de dolor solo rabia. Camino a paso apresurado por el gran pasillo cayendose en el proceso, se levantó con pesadez aún mas molesta e impotente llego delante de la gran puerta donde se encontraba su hermana abriéndola de par en par haciendo que estas hicieran un gran estruendo.

—¡¿Que significa ésto hermana Hilde?!—Grito la menor con una gran vena que sobresalía de su pequeña frente, su hermana se mantuvo dándole la espalda.

El parloteo de Geir no cesaba, lanzaba llamas de iras a cada palabra que emitía pero su ira fue interrumpida por alguien que se dirigió a ella al hablar.

—Geir, cálmate.

Su segunda hermana Hrist con su dulce y tierna voz reprendió a la pequeña levemente por su alboroto.

—Hermana Hrist... Tú también lo viste ¿Verdad? La nudillera estaba ilesa, ¿No? —Preguntó apresuradamente la pequeña.—Entonces ¡¿Por qué?! ¡¿Por qué desapareció la hermana Leif?!

—Geir, el volund no sólo consiste en convertirse en un arma divina. Es una técnica donde el humano y la valquiria se vuelven uno, en otras palabras... Se confían todo en uno al otro, luchan como uno, viven y mueren como uno.

Las palabras de Hrist cayeron como balde de agua fría en la cabeza de la pequeña rubia. En la mente de Geir solo se reproducían los momento con su hermana Leif, su dulzura, paciencia y tranquilidad las lágrimas ni tardaron en salir a lo que Hrist rápidamente la abrazo para darle todo su apoyo.

—No llores... Leif era consciente del tipo de batalla al que nos estamos enfrentando.

— Pero ni siquiera pude despedirme, no pude hacer nada por ella— Las lágrimas salian a mas no poder mojando parte del pecho descubierto de su segunda hermana, Hrist comenzó a apretarla lentamente haciendo que la espalda de Geir doliera—Me estas aplastando, hermana Hrist que fuerza...

—¡PUTOS BASTARDOS, VOY POR USTEDES!—Grito la segunda hermana mirando hacia el techo imaginando todas las cosas atroses que podía hacerle a los dioses siendo un arma divina. Había tenido un cambio brusco de personalidad dejando atrás su actitud dulce, tranquila e incluso timida atrás.

—'Ca-... Casi lo olvido... Los dos poderes que hay dentro del cuerpo de la hermana Hrist. Dos Mitades del mismos cuerpo' —Pensó la menor y estaba en los cierto. Hrist la traducción de su nombre es "El temblor del miedo y la ira" —Por favor calmate hermana Hrist.

Geir comenzó a calmar a su hermana sacándola de esa personalidad tan explosiva y aterradora trayendo de vuelta a la hermana Hrist con la que ella más compartía. Ambas hermanas fueron interrumpida por sonidos grotescos proveniente de Bruhilde quién comía como cerdo a causa del estrés de la pérdida. Comía, comía y comía como si no tuviera fondo y aún con su boca llena de sus labios salía maldiciones para Zeus, una tras otra.

Por la mente de Geir la cual estaba aterrorizada por el comportamiento de su hermana mayor, solo pasaba que si su hermana estaba comiendo ese postre llamado Salmiak que sabía extremadamente mal y que solo Bruhilde preparaba era por la simple razón de qué el estres de su hermana era enorme. Por otro lado por la mente de la mayor no dejaba de rebotar de un lado a otro el hecho de que si perdían la siguiente ronda los dioses iban a tener mucha ventaja y debía evitarlo sin importar que.

Un dispositivo encima de la mesa donde Bruhilde comía se iluminó haciendo que esta lo tomará y observando bien lo que este dispositivo le decía trago en seco y su rostro se tiñio de temor. Avento todos los platos que estaban en la mesa al suelo colocando otro dispositivo más grande en medio haciendo una búsqueda exhaustiva.