—Amor, te están preguntando qué harás ahora que el proyecto terminó. —me pregunta Ruggero mientras termino de doblar la ropa limpia.
—Uhm, es que no había pensado en eso. —admito.— Pero por ahora, tomarme un merecido descanso, ya lo necesito.
—Muy bien, sigamos.... ¿Planes para San Valentín?
—Hasta yo quiero saber eso. —suelto una carcajada.— Ya dime, amor.
—No, si te digo, deja de ser sorpresa.
Divertida niego, él continúa con su live sentado en la cama y yo guardo la ropa en su lugar antes de sentarme a su lado.
En un sábado normal sin trabajo ni nada por el estilo había sacado a relucir mi espíritu de la limpieza y organicé todo.
Ayudé a Ruggero a preparar la comida y ahora estoy escuchando que habla con sus fans antes de irse con sus amigos a una fiesta.
Respondo algunas preguntas que nos hacen, y sin duda, la más frecuente habla de cuándo nos vamos a casar. Pero la respuesta sigue siendo obvia, aún no tenemos ni idea.
Pero comprometidos ya estamos.
Cuando él finaliza el live me quedo acostada en la cama mientras se pone de pie y se encierra en el baño para alistarse.
Estoy extrañamente agotada, no hicimos nada extraordinario y aún así tengo ganas de dormir mucho. Me duele el cuerpo, no recuerdo qué hice pero al parecer fue trabajo pesado.
No sé en qué momento exacto me quedo dormida, pero en cuanto siento los labios de mi novio en mi frente, tengo que suspirar removiéndome. ¿Qué hora es?
—No te duermas sin cenar. —le escucho decirme.
—No tengo hambre, solo mucho sueño.
—Por favor.
—Ya, está bien. —me incorporo mirándole.— Te ves muy guapo, ¿a dónde dijiste que ibas?
—Aún no sé, Agustín no me dijo. Pero llegaré temprano.
—Puedes inclusive no llegar. —aseguro.— Ya te hacía falta un momento con tus amigos, fuera de casa sin ver la serie que tu novia protagonizó.
—¿Me lo vas a recordar siempre?
—Siempre. —asiento poniéndome de pie.— Es que fue demasiado divertido, definitivamente te amo.
—Y yo te amo a ti. —asegura besando mi mejilla.— Entonces, comes antes de dormir y cierra la puerta con seguro, llevo las llaves.
—Hecho.
Bajamos juntos, y mientras él sale de casa, yo me dirijo a la cocina.
Me preparo algo para cenar, subo la comida a la cama y ceno mientras veo películas. Al terminar bajo de nuevo los platos sucios y apenas alcanzo a cepillarme los dientes antes de quedarme completamente dormida.
No me despierto en su totalidad, pero entre sueños reconozco que Ruggero vuelve casi a las cuatro. Lo siento moverse por la habitación y cuando por fin se acuesta, busco su contacto antes de quedarme ahora sí, completamente dormida.
Ocho de la mañana y mi domingo empieza con la música de fondo, Ruggero está en su estudio componiendo. Busco mi teléfono comprobando que tengo mensajes de Katja y Lionel.
Reviso primero los de mi amiga.
Chiara y yo te queremos invitar a una pijamada como en los viejos tiempos. Elenita se queda con su padre y ustedes abandonan a los novios, ¿lo hacemos?
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Make A Wish.
RomanceY si pudiese pedir un deseo, desearía que seas eterno. HISTORIA CORTA.