El Amor esta Sobrevalorado © [ Destiel / omegaverse AU. ]

¹⁶ | Veneno

El suave y relajante sonido del viento podía curar cualquier intoxicación, al menos eso pensaba Dean, ya que ahora mismo su mejor opción para hacer pasar el malestar de Cas fue llevarlo al jardín trasero de la casa del ministro. Donde una gran cantidad de árboles movían sus hojas creando un agradable momento

— Toma, muerde esto — Dean le extendió una flor a Castiel. — Tiene un saco de miel detrás de su tallo, si lo muerdes te sentirás mejor

Castiel tomó la flor entre sus manos sonriéndole amablemente al alfa. Dean se había preocupado tanto por su salud que incluso se ofreció a traer mantas para cubrirlo estando en medio del jardín

— Que fue lo que pasó allí dentro — cuestionó Dean sentado al lado de Castiel con sus piernas cruzadas y su sacó cubriendo al omega. — ¿Hay alguien que tengas en mente?

Un suspiro se escuchó por parte del pelinegro. — Mi hermanastro, su esposa, las sirvientas, el médico de mi padre, hay muchas personas que pudieron haberme hecho esto. No me sorprendería

Por su puesto, ¿como no fue capaz de pensarlo antes?. Castiel no tenía a nadie en esa casa, era un completo desconocido al que todos trataban como si fuese un adorno, no muy diferente a las alfombras o las cortinas

¿Que había estado ocurriendo en ese tiempo que no pudo venir a la casa?

— ¡Cas tú eres...!

De pronto las palabras de Dean fueron acalladas por un alarido gritó proveniente del interior de la casa. Castiel se levantó casi por inercia y corrió siendo perseguido por Dean

— ¡¡Un horrible problema!! ¡¡La medicina del ministro está envenenada!!

[ • • • ]

En cuestión de minutos, la habitación donde permanecía el ministro Caín estaba rodeada de las sirvientas, Asmodeus, Lilith, el doctor Rufus y más tarde el único omega de la casa. Todos permanecieron en silencio mientras el doctor explicaba la condición del ministro con seriedad

— Polvo de hueso de albaricoque fue mezclado en la medicina. — explicó Rufus tomando el cuenco en sus manos — Si se vuelve adicto, el cuerpo se paraliza y le será más difícil respirar, así que cuando se la usa para la medicina primero se le quita las propiedades venenosas, pero... yo no hice esto, parece que alguien la puso apropósito

De pronto el metálico sonido de la espada de Asmodeus siendo desenfunda alarmó a todos en la habitación. El alfa no dudó en amenazar con su arma al primer culpable que tuviera en frente

— ¡¿Quien es?! ¿¡Quien le dió la medicina a mi padre!? — exclamó lleno de furia con su espada en manos

Todos temblaron de miedo pero más Castiel, quien agachó la cabeza con temor; su corazón latía rápido

— ¡Señor! — exclamó una sirvienta llena de terror

— ¡El hijo menor del ministro fue quien le dió la medicina! — en cuanto aquellas palabras salieron de la boca de Ruby, la mirada asesina de Asmodeus no se hizo tardar

— Así que... el nuevo hijo del ministro le dió la medicina ¿eh? — para variar, Lilith se sumó a la discuta. — Pero que curioso, ¿que acaso no acaba de volver del jardín de atrás? ¿Allí no crecen árboles de albaricoque?