⁴⁰ | Festival 1/3

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— Ellos son Meg Masters y su sirviente Balthazar Milton — presentó Lilith

Castiel hizo una reverencia frente a la mujer y volvió a incorporarse con la cabeza cabizbaja. Aquella mujer era tan encantadora como intimidante

— Es un placer conocerla, señora — musitó el omega avergonzado. — Haré mi mejor esfuerzo para qué su estadía en esta casa sea cómoda

Meg sonrió con arrogancia y se inclinó a besar la mano del omega. — No hay de qué, después de todo tarde o temprano seremos marido y mujer ¿verdad?

— Bueno... Sobre eso

— Castiel, puedes irte a tú habitación, yo hablaré con la señorita Meg unos minutos — interrumpió Lilith y por la bajo le murmuró. — Vamos, piérdete

Castiel apretó sus manos y lleno de impotencia se encaminó de nuevo a su habitación con recelo, cerrando fuertemente la puertas detrás de sí mismo. Al quedarse solas, incluso sin la compañía del sirviente personal de Meg, Lilith se sentó en la silla en frente de la mujer cruzada de piernas. Después de todo aún era a dueña y señora de esa casa

— Pese a que mi marido se encuentra atendiendo el festival, me pidió comentarle que su compromiso con Castiel queda anulado en lo que el ministro siga con la custodia del omega; por esa razón le pedimos que aguarde y...

— ¿No puedo casarme con Cas aún? Bien. — contestó con simpleza. — Sólo vine por el festival, no me molesta eso, de todos modos mi oferta sigue en pie. Si me dan al omega, les daré todas las joyas y dinero, incluso un puesto en el gobierno del Palacio Imperial si lo desean

— Tks, ¿Cómo una mujer como usted debe esperar por un omega como ese?

Meg sonrió y se acercó descaradamente a la beta de cabello rubio. — Pagaría lo que fuese por un omega masculino, ¿no lo sabes verdad? Los omegas masculinos son más probables de dar un heredero alfa y dado a que son extremadamente escasos, encontrarme con uno es razón suficiente para dar todas mis riquezas por él

Lilith paseó sus ojos vagamente por la Meg, parecía despreocupada, confiada y con una actitud cínica. Tanto que llegaba a incomodarle su fija mirada encima suyo

— Hablando de eso, ¿Castiel sigue siendo virgen verdad?

— ¿Importa? — cuestionó

— No realmente, pero los omegas pueden embarazarse rápidamente, ¿Que hay de usted? ¿Usted no es omega?

Lilith se ruborizó instantáneamente por aquello. — ¿Que cosas cree que dice? ¿Yo? ¿Omega? No me haga reír

— Que raro, juraría que la belleza que usted tiene sólo la tendría un omega — Meg le guiñó un ojo descaradamente — ¿Que hay de su esposo? No tienen hijos

— No puedo tener hijos, ¡Pero eso no es a lo que veníamos!

Meg se lanzó a reír con gracia. — Tranquila linda, sólo quería ponerte nerviosa. Esperaré por Castiel todo lo que tenga que esperar, solo manténganme al frente de la lista siempre

— No debe esperar mucho, al ministro Caín no le queda mucho tiempo, una vez que él fallezca, el luto comenzará y luego de eso, usted puede comprometerse con Castiel si así lo desea


















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— Entonces está el Reino Imperial, de dónde venimos, tú vivirás en una de esas habitaciones si lo deseas, incluso puedes vivir en ésta casa siempre y cuando sigas las órdenes de nuestra estimada Meg en todos los sentidos y...

El Amor esta Sobrevalorado © [ Destiel / omegaverse AU. ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora