3| El soso

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- hola hermanita

- win... pasa

- gracias, sabía que podía contar contigo

- win yo... hablé con mi padre...
Me dijo que no te ayudara

-... ¿En serio?, Ja! Eso fue un golpe bajo... entonces también me vas a abandonar

- tengo una idea para ayudarte, pero no sé si te va a gustar

- ¿qué es?

- tengo un amigo que está alquilando una habitación, puedo decirle que te la dé a ti y mientras tú consigues trabajo yo te ayudo en el pago

- ¿En serio?, Eres la mejor, ¡claro que quiero!

Eso fue lo que dije pero no esperaba que fuera así...
Una casa diminuta, una habitación que no era ni la mitad de lo que es mi habitación, sala pequeña, muebles baratos, un baño pequeño... ni bañera tiene, es un lugar desagradable y poco ambientado, esto es una porquería, un chiquero, una cajita de fósforo... increíble.
Salí de mis pensamientos con una cara seguramente de desagrado cuando el chico de piel morena, buzo gris, pantalones anchos y anticuados que no le venían bien, me habló.

- Win Metawin, 22 años, altivo, creído, arrogante, se cree el dueño del mundo y además responsable de una gran pérdida en la empresa de los Metawin.

- vaya, parece que el niño soso hizo su trabajo. Pero dime, ¿Quien eres tú?

- me llamo bright, no necesitas conocerme, con que no te involucres conmigo basta y sobra

- ¿Cómo le haces para vivir así?

- mira, tu hermana me pidió el favor y por eso lo hago, si no te gusta, la puerta está abierta.

Mierda, es esto o nada, fue lo que dijo mi hermana... no tengo opción... ¡Joder! Me toca aguantarlo.

- está bien, me quedo, pero no le estás haciendo un favor ya que te va a pagar, ¿O no?

- bien, quiero dejar las cosas claras, ésta es mi casa y yo pongo las reglas.

Estuvo diciendo un montón de estupideces a las cuales no presté atención, solo estaba pensando en esta mierda, tengo que demostrarle a mi padre que maduré y soy responsable lo más pronto posible.

- ¿Quedó claro?

- uhmm, si ajá

El tipo se fue, me llevó a mi habitación... no, yo no puedo vivir aquí, esto no es de mi estilo, no es mi nivel. Debo salir de esto pronto.

Pasaron unas horas, tanto bright cómo win estaban en sus habitaciones sin salir, pronto se hizo de noche y ya win empezaba a tener hambre...

- niño tengo hambre, tráeme comida - dijo win en un grito desde su habitación, pero no recibió respuesta del otro, así que salió a la cocina.

- Ey, te dije que tengo hambre.

- aquí no tienes sirvientes, cocina tu propia comida

- pero tú estás comiendo, ¿No podías hacer un poquito más para mí?

- claramente no, si quieres comer entonces cocina - hice un gesto de molestia pero supongo que tiene razón. El problema es que... no sé cocinar.
Abrí la nevera, cogí lechuga, cebolla, queso, busqué pan y me preparé unos sandwiches pero en el intento de calentarlos "un poco" se quemaron, fue todo un desastre, no pude evitar sentirme avergonzado.

ArroganciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora