WICKED HATE | FRED WEASLEY (traducción)

15

RESACA
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Intenté no salir de mi cuarto por el resto del día, pero en un momento, no pude ignorar el hambre que tenía. Al salir de mi dormitorio, encontré a Draco sentado con la cabeza entre las rodillas.

—¿Estás bien?— le pregunté, poniendo mi mano sobre su hombro y con la voz más ronca que jamás haya existido.

— Uf, no voy a volver a beber en la vida — murmuró. — Me siento como una mierda.

— Eso es lo que todos decimos. Bienvenido al club.

— ¿Sabes cuál es la peor parte? Soñé con Potter. Ni siquiera en mis sueños de borrachera el cabrón me deja en paz.

No pude evitar reírme y después de darle un pequeño abrazo, salí al pasillo donde todos los estudiantes de cuarto año en adelante tenían un aspecto horrible mientras que lidiaban con los estragos de la noche anterior.

Mis ojos encontraron a Liv y Pauline bastante rápido, que estaban apoyadas contra una de las paredes, hablando, con un aspecto demacrado.

— Buenos días — dije mientras me acercaba a ellas, abrazándome por el frío que hacía.

— Más bien "buenas noches" — dijo Pauline con una voz casi tan ronca como la mía.

— Finalmente resurgiste de entre los muertos.

— Uf, ni siquiera lo menciones. No puedo creer que un cuerpo humano pueda tomar tanto alcohol.

— Bueno, no has sido la peor. Después de que te fueras, Livie y yo seguimos bebiendo.

— Liv, ¿cómo estás?

— Muerta por dentro — respondió ella, dando un sorbo a su botella de agua. —No puedo recordar nada desde la medianoche. Lin me ha estado contando cómo llegué a mi habitación.

— Sí, no importa lo borracha que esté, puedo recordar todo lo que pasa — Intervino Pauline.

— Qué bendición. O maldición. Ya no lo sé.

— Por cierto, ¿has escuchado los rumores? Estaba caminando hacia el Gran Comedor cuando escuché a una chica de Gryffindor, creo que ese es el nombre de la casa roja, hablando de eso —dijo Pauline, bajando la voz — Le estaba preguntando a Livie sobre eso, pero ella vive en su propio mundo, ya sabes.

Liv ni siquiera se molestó en responder a eso, simplemente siguió bebiendo de su botella de agua.

— Aparentemente, Fred Weasley y Sienna Plums pasaron la noche juntos.

Mi cuerpo sintió escalofríos cuando mencionó ese nombre. Mierda, ya lo estaba olvidando.

— Pero, ¿a alguna de vosotras os sorprende? Porque a mí no. Están hechos el uno para el otro — dije tratando de sonar como si no me importara.

— ¿No te importa? — Liv me preguntó, genuinamente preocupada.

— ¿Por qué tendría que importarme?

—T us dos enemigos se están uniendo...

En el momento exacto en que esa frase salió de su boca, se abrió la puerta del pasillo y allí estaba él. Se veía bastante demacrado; sus ojos tenían unas ojeras pronunciadas debajo de ellos, su cabello estaba un poco desordenado y se movía bastante lento.

Fred se acercó a un grupo de Gryffindors que estaban frente a nosotras, en la otra parte del pasillo. Tan pronto como lo vi, sentí cómo mi corazón se aceleraba.

Maldita sea, ¿por qué no podía olvidar eso?

Sus ojos se encontraron con los míos por un momento y un pequeño tono rojo cubrió sus mejillas también. ¿Se estaba sonrojando?