WICKED HATE | FRED WEASLEY (traducción)

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LIBERANDO LA TENSIÓN
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Lo primero que hice el lunes por la mañana fue agarrar mi escoba y correr hacia el campo de Quidditch vacío, para comenzar a entrenar. Había echado de menos la adrenalina , el cansancio en mi cuerpo después de golpear la Bludger y las volteretas en el aire al volar mi escoba, la cual, no había tocado desde que Umbridge me la requisó.

Justo cuando estaba terminando el entrenamiento, escuché que alguien gritaba mi nombre desde el otro lado del campo y vi a una mujer familiar con cabello púrpura que me saludaba. En cuanto la reconocí, corrí hacia ella y la abracé tan fuerte como pude.

— ¿Cómo sabías que estaba aquí? ¿Está todo bien? — Pregunté, sorprendida de verla.

— Sí, solo quería darte una pequeña visita, pero cuando fui a tu casa solo estaba Oli, así que me dijo que estarías por aquí, y como no hemos no nos hemos visto en un tiempo... aquí me tienes.

— Ya bueno, estás un poco ocupada con la Orden, ¿no?

— Más o menos, pero ahora se donde vives, así que me verás por allí a menudo.

Me reí disimuladamente. — Mi casa es tu casa, Tonks, ya lo sabes.

— Así que entrenando de nuevo, ¿eh? ¿estás lista para ser la mejor jugadora de las Arpías? — cuestionó dándome un leve puñetazo en el brazo, amistosamente. 

— Primero tengo que entrar en el equipo. Pero sí, voy a hacer todo lo que pueda para estar en él y ser la mejor.— Me senté en la hierba fresca y Tonks hizo lo mismo.  — Sin embargo, ya he tenido suficiente por hoy.

— Bien, entonces puedo invitarte a una pinta.

— ¡Oh, por favor! Me encantan los tés y los cafés de Remus, pero me falta una buena cerveza.

Ella abrió el bolso que llevaba en el hombro y sacó dos botellines que abrió hábilmente con un par de llaves. Tomé el primer sorbo de la bebida fría y me recosté en la hierba, sintiendo el sol del verano en mi cara. 

— Bueno, ¿cómo va todo, Dora?

— Me voy a mudar con Remus, ¿sabes? — anunció con una sonrisa soñadora en su rostro.  Abrí los ojos ampliamente y bastante sorprendida mientras le daba otra sonrisa. 

— ¿En qué estás con mi figura paterna, Nymphadora? — me burlé de ella y haciendo que pusiera los ojos en blanco.

— ¡No me llames Nymphadora! — bramó antes de comenzar a hacerme cosquillas y haciendo que casi escupiera el sorbo que tenía mi boca.  — Todavía no lo sé. Tengo sentimientos por él, eso es obvio...

— Y él también siente algo por ti — le garanticé. 

Probablemente no era el tipo de afecto que Remus había sentido por Sirius - que obviamente solo había sido asunto de ellos - pero sabía que él, en realidad, tenía fuertes sentimientos románticos por Tonks y que quería cuidar de ella y no lastimarla. Aunque si la idea de lastimarla hubiese pasado por su mente, me daría igual si fuese Remus o no, le hubiese pateado el trasero. 

— Eso espero...— se rió tan pronto como una idea pasó por su mente. — No tiene nada que ver con esto pero últimamente he estado hablando con Charlie Weasley, ¡y me ha dicho que sus hermanos van a abrir una maldita tienda de bromas!

Solté un bufido recordando como había descubierto que Fred y George eran mis nuevos vecinos. — Sí, su tienda está al lado de mi casa y su piso está en el mismo edificio, así que ahora somos vecinos.

— ¡Ahh que guay! Asi podrás colarte en su casa y tener sexo duro más a menudo.

— ¡Tonks! — me reí disimuladamente, dándole un suave puñetazo en el brazo. — ¡¿Como lo sabes?!