WICKED HATE | FRED WEASLEY (traducción)

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VÍNCULO
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Después de un par de minutos, la Sra. Weasley interrumpió el silencio; — Chicos, ¿os vais a quedar a dormir?

— Sí, aunque mañana ya pasaremos la primera noche en el piso. Hay algunas cosas que aún no están listas, así que queremos estar allí antes de abrir la tienda — dijo George, mientras Fred se levantaba de mi lado para posicionarse junto a él.

La pelirroja asintió con la cabeza, sin parecer del todo satisfecha con la respuesta. No era un secreto para nadie el hecho de que Molly Weasley no apoyara exactamente la decisión de los gemelos sobre tener una tienda de bromas. Aunque yo personalmente, pensaba que era una gran idea.

Una hora más tarde, los gemelos anunciaron que necesitaban dormir y sus padres los siguieron poco después, preguntando si Remus y yo estábamos bien y ofreciéndonos las habitaciones vacías de la casa. Me negué amablemente ya que, aunque estaba extremadamente cansada, Remus no parecía quere dormir y no iba a dejarlo solo.

— Lilith, ¿por qué no te vas a dormir, querida? — insistió el licántropo, pero rápidamente negué con la cabeza haciendo que él dejara escapar un largo y profundo suspiro. — Bien, entonces, ¿te importaría acompañarme afuera? Necesito tomar un poco de aire fresco.

Abrimos la puerta en silencio, asegurándonos de dejar todas las luces apagadas para que no molestaran a nadie, y nos sentamos en el porche, arrimados, para mantener el poco calor a nuestro alrededor. Desde ahí, la tenue luz de la luna nos cubría bajo la noche estrellada y Remus no pudo evitar mirarla con desprecio y lágrimas en los ojos. Cansada, apoye mi cabeza en su hombro y él palmeó mi rodilla.

— Gracias por todo el apoyo que me estás mostrando— habló con sinceridad, dándome una pequeña sonrisa a la que correspondí.

— No hay nada que agradecerme, Remus. Tú hubieras hecho lo mismo por mí.

Un silencio muy breve se instaló entre nosotros. No era incómodo en absoluto, pero se sentía debido al sueño de las altas horas de la noche. Probablemente solo quedasen unas pocas horas para el amanecer.

— Lilith, ¿puedo preguntarte algo?

— Claro.

— Allá arriba, ¿viste a Circe como tu Boggart? — Preguntó cuidadosamente, observando mi reacción.

— Si... fue terrible.

El recuerdo de mi madre sosteniendo su varita contra el cuello de Fred me hizo sentir enferma y llena de tristeza. El miedo en sus ojos marrones y cómo murmuraba cariño se había grabado profundamente en mi piel y todo lo que quería era correr adentro, subir las escaleras y besarlo con todo el amor que sentía por él.

— Pero no sólo viste eso, ¿verdad?

Mi corazón se aceleró y levanté la cabeza del hombro del hombre.

— ¿Cómo lo sabes?

— La reacción de Molly. Ella ya sabía desde hace un tiempo que Circe era tu Boggart, pero hasta ahora nunca te había tratado adecuadamente, así que... has tenido que ver algo que realmente la ha sorprendido...

La idea de confesarle a Remus mis sentimientos por Fred divagó en mi mente. El hecho de admitirlo en voz alta ante alguien que no fuese Liv o Hermione, me revolvía. Pero, por otra parte, Remus era una de las pocas personas en las que confiaba con mi vida, además de que siempre, me había defendido y protegido cada vez que había tenido la oportunidad, y a su vez, fue de los primeros en enterarse sobre mis encuentros con el pelirrojo.

— No...—  Finalmente admití. — Lo que realmente vi fue a Circe matar a Fred Weasley y, bueno... la Sra. Weasley lo vio, por eso ha sido tan considerada conmigo.