La Sombra Y El Deseo

CastaPrime

Por primera vez en mucho tiempo se arropó en su cama, se abrazaba a sí misma tenía tanto miedo de todos estos nuevos sentimientos despertando. Se recrimina  su debilidad, si no hubiese bajado la guardia probablemente Horde Prime no tendría información alguna y si no  hubiera bajado la guardia Castaspella no la hubiese besado.
¿Castaspella la había salvado en las cuevas? ¿La mujer sentía algo por ella? ¿Y ella que sentía? si apenas el Lord de la paz (guerra) la había besado también para distraerla y usar sus guantes.
Probablemente era su soledad jugando trucos en su cabeza y ambos le eran totalmente indiferente. Se sentía nerviosa.
Se puso de pie, necesitaba aire, pero  se detuvo en seco al observar esa sombra, ese porte, aún no salía de su escondite, pero sabía que la miraba.
Estaba muy molesta, deseaba tanto tener magia y combatirlo ella misma.
Él salió de las sombras, ella no se inmutó, no demostraría miedo.
Silencio...
-"Aléjate de ella" - Dijo Castaspella con un tono que Shadow Weaver jamás había escuchado"
El sólo se dedicaba a mirarla, comenzó a acercarse lentamente. Castaspella se interpuso,  Prime estaba a punto de atacar, cuando Shadow Weaver la hizo a un lado colocándola detrás de ella.
Esta vez no tenía puestos los guantes. La miraba con profundidad, mientras tanto ella le dedicaba una mirada neutral, aunque Horde Prime podía escuchar su corazón latir aceleradamente ¿Estaba asustada?
Se esfumó de la nada.
Y Shadow Weaver sintió que podía volver a respirar.
-"¿Estás bien?" - Preguntó Castaspella.
-"¿Por qué no habría de estarlo? - Dijo en un hilo de voz, su respiración era pesada y sus manos temblaban.
La Head of Socceress decidió  seguir observando.
-" Me quedaré contigo"
-"¿Qué? No!"
-"Él puede volver"
-"No"
-"Es esto o cambiarte a la habitaciones cerca de Micah y Angella"
-"Basta"
Castaspella se acercó peligrosamente.
-"¿Tanto te molesta que te haya besado?"
-"Etheria está en peligro"
-"No has contestado"
-"Deja de ser tan infantil"
Los ojos avellana se enjugaron de lágrimas y dejaron el salón.