T/n ¿Granger? ~Draco Malfoy~

Confesión dolorosa...

-Hola - dije llamando la atención de todos.

Tom y Mattheo se giraron como si fueran la maldita niña del exorcista ya que estaba de espaldas a mi.

Draco me miró serio y luego miró mi bandeja de comida todavía llena, otra vez a mi y luego entrecerró los ojos.

- Come. - Ordenó aún sin dejar de mirarme.

- Voy a comer, tranquilo, pero antes, ¿ellos son los compañeros de cuarto que supuestamente se preocupan por mi? - Le pregunté aún con la mirada de todos fija en mí.

- S...

- ¿Supuestamente? - Le interrumpió Tom a Draco y este le lanzó una mirada asesina antes de volver a mirarme.

- Princesa - empezó Mattheo con un tono suave-. ¿¡Sabes el miedo, angustia y preocupación que hemos pasado al ir al campo, no verte allí, recorrer el puto castillo y las afueras de este corriendo como cerdos!? - Espetó Mattheo furioso acercándose a mi para luego darme un abrazo muy fuerte.

- Pequeña, como vuelvas a hacer eso se lo decimos a papá... - Tom se calló al instante en el que se dio cuenta de lo que dijo.

Mattheo y yo clavamos la mirada en el para luego todos mirar a Malfoy esperando su reacción.

- ¿Qué? - Preguntó Malfoy confundido tras nuestras miradas.

- ¿Sabes que me llevo bien con tu padre? Pues si y aunque se lo digáis a vuestro padre, no se atreverá a hacerme nada. - Dije crujiéndome los dedos, cosa que hago siempre cuando estoy nerviosa.

- Ma vie, ya se que Voldemort es tu padre, no hace falta que mientas, que se te da horrible por cierto. - Malfoy nos miró con una sonrisa divertida cuando lo miramos atónitos.

- ¿Cómo... - Dije confundida.

-... Sabes... - Siguió Mattheo aún más.

-... eso?-Terminó Tom mirándolo cómo si tuviera 3 cabezas.

- Porque cuando fui a mi casa porque teníamos una reunión a la que no habéis asistido por cierto.

- Fue porque nos quedamos aquí con ella para protegerla.

- Es verdad me acuerdo, cuando nos dolía el brazo todo el día porque no asistimos, pero luego se lo explicamos a nuestro padre. - Dijo Mattheo con una mueca de dolor muy dramática por cierto.

- Si bueno, - siguió Malfoy -, vuestro padre nos dijo que tendríamos que proteger a una persona muy importante en su vida, claramente todos sabíamos que era su hija porque teníamos la orden de buscarte por todos los mundos posibles tanto mágicos como reales de esos muggles, obviamente que la mayoría sólo buscamos por el mágico y por eso no te encontramos antes.

- Que listos, - murmuré con sarcasmo.

- ¿Qué? - Dijo Malfoy.

- Qué seguramente mi padre os dijera que me secuestraron y pues los secuestradores no serán tan tontos como para mantenerme y además en el mundo mágico así que me abandonaron en el mundo muggle. - Dije con obviedad-, es fácil descifrar eso si tienes aunque sea una neurona.

- Eh, si, eso pensamos todos. - Dijo Tom nervioso.

- Bueno, pues en la reunión nos dijo tu nombre y tu nuevo apellido ya que te adoptaron y nos contó todo lo que él sabía para protegerte si pasa algo.

- Y por eso vi tantos regalos y Grageas cuando me desmayé.

- Eh no, lo mantuvimos es secreto los que estábamos pendientes de ti haciendo turnos.