Capítulo 30

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-Mirio, ya no seas así. – dijo Negire a su amigo. Mirio llevaba tres días sin hablarle a Tamki tras asumir que él se había revolcado con quien había resultado ser su hermana menos, y, a pesar de la insistencia de Tamaki, no quería perdonarlo. – Además, ____ es feliz con él.

-Anni.

-Ella decidió seguir llamándose ____. – le reprochó la chica. Tras ir a la casa de sus padres, ellos tuvieron un lindo reencuentro y cenaron juntos, pero ____ finalmente decidió volver con Aizawa y dejar las cosas tan y como estaban antes, ella nunca había sido Anni desde que se fue con Kai, y de eso ya había pasado mucho tiempo, ella ya no era Anni. Además, que, si bien eran sus padres biológicos, no podía evitar ver a Aizawa como su padre al cuidar de ella y a Eri como su hermana, ya eran una familia, no quería separarse de ellos, claramente sus padres y hermano respetaron su decisión y le dijeron que podía volver cuando quisiera de visita.

Pero Mirio, había adoptado una irritante postura de hermano mayor a la que nadie se acostumbraba.

-No voy a seguir pidiéndote perdón. – dijo Tamaki sentándose adelante sorprendiendo a Mirio. Tamaki ya había pedido perdón eternamente durante dos días, y que fuera un chico tímido, no significaba que no pudiese hartarse de la situación. – No sé de donde viene tu instinto protector, pero si lo piensas de un modo, la encontré primero, es mía.

-Tamaki, la idea es que se calme. – dijo Negire molesta, Mirio no dijo nada, y se dirigió a mirar por la ventana, aún era muy temprano para que ___ llegara. – No durará demasiado, es algo fuerte su situación, dale tiempo.

-No esperaré ni un día mas para almorzar con mi novia. – dijo Tamaki molesto dándose la media vuelta hacia Mirio, quien lo miró desafiantemente. La chica entre ellos soltó un suspiro agotador. Tamaki estaba muy molesto, era algo terrible para él tener que dejar de estar con ____ tres días porque Mirio la sigue a todas partes y dice que tienen cosas que hermanos que hablar, por lo cual Tamaki apenas puede hablar por teléfono con ella, pues en la hora del almuerzo, Mirio también se la llevaba a alguna parte. – Si bien es tu hermana, es mi novia, y no pienso pasar ni un día más alejado de ella.

-Por favor, ni que estuvieran casados. – dijo Mirio mirándolo seriamente. – Ahora que llevas un tiempo estando con ella ¿te piensas que son siameses? Deja que se libre de ti al menos unos días.

-Ella está mucho mas harta de ti que de mí.

-YA BASTA. – Dijo la chica y ambos se voltearon hacia otro lado quedándose en completo silencio. – No recurramos a la violencia ¿no somos pacifistas?

-No sé por qué. – dijo ____ recostada en el pasto junto a Shoto, este la miró un segundo escuchando sus problemas. – Tamaki está furioso últimamente, no conmigo, pero está molesto, es un poco más... brusco, no sé como expresarlo. Es divertido igualmente, pero es extraño. Y Mirio de pronto me arrastra a todas partes con él.

-Es tu hermano y no te ha visto en muchísimos años, de seguro que te extraña mucho. – dijo el chico mitad y mitad y ella asintió con la cabeza poco convencida. – Y de seguro a tu novio no le ha gustado dejar de pasar tiempo contigo.

-Eres muy muy muy sabio, yo no podría haber sacado esa conclusión sola. – dijo la chica soltando una pequeña risa mientras miraba el cielo. – Tener un hermano sobreprotector y un novio celoso es una carga pesada... soy increíble al ni siquiera sentirme mal teniendo que vivirlo, soy genial.

-Lo eres. – dijo Shoto riendo unos segundos, ambos chicos escucharon unos pasos a su lado y se voltearon a mirar hacia la derecha. Un chico con el cabello purpura y muy desordenado se paró frente a ellos en silencio. – Qué pasa.

Lo lindo de la Timidez [Tamaki Amajiki]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora