Capítulo 16

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-¿Hola? – dijo ____ despertando y contestando su teléfono sin mirar quien la llamaba, ella soltó un bostezo.

-Ah, lo siento, te desperté. – dijo Tamaki un poco nervioso al otro lado de la línea. ____ abrió los ojos de golpe y se sentó en la cama de un golpe. – Si quieres llamo mas tarde, no hay problema.

-Ah, no, no, está bien. – dijo ella mirando el reloj, en realidad su siesta después del almuerzo había durado más de lo que esperaba ¿cómo era posible que haya dormido tres horas? Eran ya las cinco de la tarde. – Estaba despierta.

-Ah, bueno. – dijo Tamaki rascándose un poco la cabeza y miró sus pies un momento, estaba sentado en su escritorio en su casa. No podía creer que le iba a hacer caso a Mirio, el chico soltó un suspiro. – Ah, resulta que hoy es... bueno, es cuatro de agosto.

-Ah, si, creo. – dijo ____ mirando a su alrededor, buscando el calendario. Si, definitivamente era esa fecha. Se quedó en silencio unos segundos.

-Bueno, quiero ir al Hanabi. – dijo Tamaki soltándolo de repente, se miró al espejo, estaba completamente sonrojado, ____ se sorprendió de inmediato. – Te quería invitar, quiero ir contigo.

-Ah, sí, iré. – dijo _____ sonrojada totalmente. – Bueno, entonces tengo que prepararme, pasa por mí a las ocho.

-Ah, está... - ella colgó el teléfono y Tamaki miró el suyo unos segundos. Sonrió, realmente iba a ir con ____ al Hanabi, verían los fuegos artificiales juntos, estaba demasiado feliz por ello ¿debería vestirse diferente? ¿O debería sólo usar lo de siempre?

Tamaki: Me dijo que si.

Negire: Estamos afuera, abre.

Tamaki bajó corriendo las escaleras y abrió la puerta a sus amigos, Mirio tenía una gran bolsa en la mano, los tres chicos subieron a la habitación de Tamaki. Neguire lo hizo sentarse en el asiento del escritorio y Mirio sacó una tabla para planchar.

-Muy bien. – dijo Neguire sacando un bolso lleno de maquillaje, asustando a Tamaki por completo, ella lo observó unos segundos. – Tu piel es lisa, no necesitas base.

-No creo que necesite maquillaje. – dijo Mirio mirándola un segundo. – Tampoco es para tanto.

-Tu cállate. – dijo Neguire mirándolo mal, Mirio rodó los ojos dándose vuelta para hacer su trabajo. La chica miró a Tamaki unos segundos. – A las chicas nos encantan los hombres con un poco de maquillaje.

-Está bien. – dijo él cerrando los ojos. Su amiga se encargó de hacerle un maquillaje natural, ponerle un poco de sombras, hacerlo ver guapísimo, un poco de brillo labial para resaltar sus labios en su cara pálida, y realmente se veía guapo. Mirio terminó de planchar el yukata y miró a su amigo. – Qué opinas.

-Se ve guapo.

-Qué es esto. – dijo ____ mirando a su alrededor impresionada, Eri y Aizawa la habían llevado a un lugar en donde vendían Yukatas, pero habían demasiadas ¿cómo se supone que iba a elegir la correcta. – Jesucristo, hay demasiadas.

-____ chan tiene el cabello oscuro y los ojos claros, creo que un color azul marino haría resaltar sus ojos. – dijo Eri señalando las Yukatas de color oscuro al lado derecho, Aizawa asintió con su cabeza. – Vamos a elegir una.

Después de estar un buen rato buscando una Yukata para ____, al fin se decidieron por una que era de color azul marino y tenía dibujos de flores blancas, pero sólo era el contorno de las flores plasmadas como un dibujo en el yukata. La cinta de su cintura también era de color blanco, por tanto, el recogedor de cabello tenía que ser a Tono.

Lo lindo de la Timidez [Tamaki Amajiki]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora