Lo lindo de la Timidez [Tamaki Amajiki]

Capítulo 20

-Estoy agotada. – dijo la chica en un suspiro agotado, Todoroki también parecía cansado, ambos llegaron frente a la casa de la chica. – Deberías irte a tu residencia, mañana tienes clases ¿no?

-Si, también deberías entrar. – dijo el con una sonrisa despidiéndose con la mano, la chica le sonrió y copió su gesto. – Nos vemos la próxima vez.

-Adiós. – dijo ella mirando como el chico se alejaba por la calle, ella iba a entrar a su casa, pero se detuvo casi inmediatamente.

-_____. – Tamaki estaba gritando su nombre, él venía corriendo desde el otro lado de la calle, ____ salió de inmediato a recibirlo afuera, lo miró preocupada. - ____, que bueno que estás aquí.

-Qué pasa ¿estás bien? – dijo ella preocupada, el chico la miró a los ojos unos momentos, estaba agitado, había corrido desde su casa hasta allí. – Tamaki, no entiendo, qué pasa.

-Es que... no lo sé. – dijo el sonrojándose ¿Cómo se supone que debía expresar lo celoso que estaba? Sentía que su pecho dolía tanto que iba a morir. – Quería asegurarme que hubieras llegado bien.

-¿Cómo sabías que iba a salir? – dijo la chica mirándolo un poco sorprendida. – Oh, cierto, fui a buscar a Todoroki kun a la escuela.

-Yo... a mi no me gusta. – dijo el chico sonrojándose, sorprendiendo por completo a ____, la chica lo miraba impresionada, su cara estaba nerviosa, sonrojada, frustrada. – Digo, si me gusta que tengas amigos, pero... pensé que... estaban en una cita.

-¿Qué dices? No, claro que no. – dijo la chica abrazando al chico y escondiéndose en su pecho, Tamaki la abrazó con fuerza y apretó un poco los ojos. – Todoroki kun y yo solo solo amigos, nada más que eso.

-Es que... - el chico no sabía como expresarlo. – Me sentí... no lo sé. Extraño. Solo quería estar allí contigo en su lugar.

-Tamaki...

-Mirio y Negire me dijeron que me calmara, que no era nada, que me quedara en casa... - dijo el chico soltando un suspiro, debía estar demasiado celoso para llegar corriendo a su casa, ____ lo entendía, sólo lo siguió abrazando. – Pero no pude, lo siento tanto.

-No pasa nada, está bien. – dijo ella mirándolo mientras separaba un poco de él. – Lo entiendo, Tamaki.

-Sé que esto va a sonar egocéntrico, pero... - el chico carraspeó su garganta, un poco nervioso, no sabía cómo decirlo. – Es que... Sólo quiero ser yo.

-¿A qué te refieres?

-Es que no quiero que... - el chico no sabía como decirlo. – Sé que no tengo derecho a exigirte nada, pero estoy muy... celoso.

-Lo sé, Tamaki y está bien...

-Y quiero ser sólo yo. – dijo el chico interrumpiéndola y mirándola a los ojos con tristeza, como un cachorrito hambriento. – No quiero... que mires a nadie más que a mí.

_____ sintió que su corazón salió disparado de su pecho ¿Tamaki estaba siendo territorial con ella? No podía creerlo. Su corazón se aceleró a mil, la sangre comenzó a subir hasta sus mejillas haciendo su rostro completamente rojo, Tamaki lo podía ver, él también estaba avergonzado, el nunca decía cosas como esas, pero era lo que realmente sentía.

Si, estaba siendo territorial con ella, porque no quería perderla por nada del mundo, era lo más importante para él.

-Sé que está mal decirlo de esta forma o, de cualquier forma. – dijo él nervioso, sin saber por qué había dicho eso, sabía que le causaría bastante vergüenza el hacerlo. – Yo sé que está mal el ser celoso, es símbolo de ser posesivo, no quiero ser posesivo contigo, pero es que...

-Tamaki, no pasa nada...

-Es que te quiero conmigo. – dijo el chico, las palabras salían de su boca antes de que siquiera pudiera pensarlo, ____ estaba completamente sorprendida, su corazón comenzó a latir como loco, su cara se tornó nuevamente roja, los ojos de Tamaki la miraban fijamente, era una mirada tan fuerte, una mirada que nunca se había imaginado que Tamaki podría hacer, no podía creerlo. – Es que... yo...

Tamaki tragó saliva y en cuanto abrió la boca, el mundo se detuvo, todo pasó en cámara lenta, no había ruido de ambiente, como cuando caías a una piscina y no podías escuchar nada a tu alrededor, como si solo estuvieran ellos dos, solos en el mundo, ____ abrió los ojos inmediatamente después de escuchar aquellas palabras saliendo de su boca.

¿Cómo era posible que lo hubiera dicho? Se sentía tan avergonzado, pero aún así, no dejaba que tu timidez saliera, su coraje, después de una guerra eterna con su timidez en su interior, se había empoderado por completo del chico. Mirando la cara que tenía ____ en ese momento, era inevitable, estaba sonrojada, con la boca entreabierta, unos ojos sorprendidos, era una expresión increíble.

Todo estaba yendo demasiado lejos, mucho más lejos de lo que esperaba al salir de casa. Después de que los tres chicos volvieron a casa tras escuchar aquella respuesta de ____ en el parque de diversiones, Tamaki sufrió hasta que se oscureció el cielo, no pudo evitar pensar "ella debería estar en su casa ahora", preguntó a Negire y a Mirio, ninguno estuvo de acuerdo con que él fuera a su casa, pero no podía evitarlo.

Necesitaba verla, tan solo verla. Pero definitivamente no estaba solo viéndola en ese momento.

El chico dio un paso al frente sorprendiendo nuevamente a la chica frente a él, ella no reaccionaba, él se acercó otro paso hasta ella y con una de sus manos tomó delicadamente su cintura, con la otra, tomó su mentón con suavidad, acercó sus labios a los de ella, hasta el punto que sus respiraciones agitadas se mezclaban.

-Tamaki...

-¿No escuchaste lo que te acabo de decir? – dijo el chico. A pesar de que su coraje estaba totalmente empoderado, su timidez aún permanecía plasmada en su cara como un sonrojo notable. La chica lo miró sus ojos brillaban.

-Si lo hice. – dijo ella terminando de juntar sus labios. A Tamaki le fue imposible contenerse de acercar más sus cuerpos, presionando la mano que tenía en la cintura de la chica. Ella pasó una mano por el cabello del chico intensificando más el beso, ambos, después de un rato, se separaron por falta de aire, se miraron directamente a los ojos, agitados por completo. – Pero ¿lo podrías repetir?

-Claro. – dijo el chico dándole un corto beso en sus labios. – Te Amo.