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–¿Changbin hyung? Yo tampoco pensé encontrarlo aquí, me tomo por sorpresa totalmente. – Dice un Jisung sonriente.

–Y por lo que veo, eres terreno prohibido. ¿Es él bebe que cuidabas? No parece tan bebe por lo que me dijiste. – Changbin tenía una clara cara de confusión respecto al pequeño niño que Jisung por obvias razones aun cargaba.

–Si, es él. Es difícil de explicar. Otro día le explico mejor hyung. Es un tanto especial a veces, pero así lo amo ya. – Dice Jisung mirando a Minho.

Este tenía una expresión con demasiadas emociones mezcladas. ¿Celos? ¿Confusión? ¿Hambre? Solo sabía que se le revolvía la tripita, y no del buen modo. ¿Por qué su papi tenía tantos amiguitos? Estos claramente le robaban la atención de Jisung y Minho odiaba aquello. Con suerte había empezado a llevarse bien con Chan hyung.

–Oh, hola chiquito, mi nombre es Changbin. Puedes llamarme Binnie si gustas. – Dijo ese sonriente chico que había coqueteado descaradamente con su papi.

Justo en el momento en el que Minho iba a soltar una grosería, Chan apareció con las entradas en mano. Al llegar y ver a un chico con pinta de motero macarra fue directamente a ponerse delante de Jisung y el pequeño Minho, al cual ya empezaba a apreciar demasiado.

–Quién eres y que quieres, si viniste a molestar no pierdas tu tiempo y lárgate ahora o te las verás conmigo. Tus pintas de matón no me dan miedo. – Soltó Chan de una y sin tapujos.

Changbin soltó una sonora carcajada.

La situación le daba gracia.

Tenía a un niño mirándole mal y no sabía la razón por la cual lo hacía. Un chico que se veía mayor que él llamándolo macarra con cara de asesino. Y a un Jisung avergonzado porque la gente ya comenzaba a mirar en su dirección.

A Jisung no le gustaba ser el centro de atención.

- Chan hyung, esto no es lo qu...

–No Jisung, no tienes que dejar que te menosprecien, tienes que plantarles cara a estos abusones.

–Es que hyung no es lo que parece. Él no es un abusón, es más el otro día me ayudo a defenderme. Él no es malo hyung. – Jisung intentaba convencer a Chan mientras este solo lo miraba con desconfianza. – Hyung, por favor créame. En la casa le cuento, solo calmémonos y entremos Minho empieza a irritarse.

No estaba equivocado. A Minho la situación y el hecho de que varias personas se les quedaron viendo había comenzado a irritarle.

–Papi, quiero ir a los tronquitos. Dile a ese señor que nos deje ya para ir a las atracciones. – Minho seguía viendo mal a Changbin. En estos momentos era una posible amenaza para él. Todo aquel que pareciera que robaba la atención de su papi de él, lo era, menos Chan claro.

–Está bien, Minnie, ahora nos vamos. Changbin hyung, perdón por todo esto. Son algo tercos a veces. Nos vemos otro día hyung, no se olvide de escribirme. – Dijo mientras agarraba el brazo de Chan para encaminarse al parque. – Chan hyung ~esta vez sí se pasó. Pero le perdono por que fue un acto bonito de su parte.

–Papi, ¿quién era él y por qué te decía cosas bonitas? Solo Minnie puede hacer eso, bueno y un poquito Chan hyung. – Jisung soltó una risita.

–Bebe, es un amigo que me ayudo el otro día. Me surgió un problema y me ayudo aun sin conocerme. – A Minho seguía sin agradarle.

–Okay papi, ¿pero ya podemos subirnos a algo? – A esa sonrisita Jisung no sabía decirle que no.

–¿Channie a cuál primero? – Miro expectante de una respuesta del mayor.

–No te salvas, aunque me mires así Jisung, en la casa hablamos tú y yo. – Se giró a ver a Minho. – ¿Qué te parece si primero vamos a las tacitas peque? – Minho asintió eufórico. – Genial, tacitas, allá vamos.

Los chicos se encaminaron a dicha atracción. No había cola así que pasaron directo.

Toda la tarde pasó entre risas y algún que otro berrinche de Minho. Uno de ellos fue por los dichosos dulces de los tronquitos. Un niño le había robado su sitio. Igual quedaron en buen lugar, pero el niño había arruinado el plan perfecto del pequeño.

Jisung miraba con preocupación a Minho. Hace rato que se tomó un vaso grande de jugo de manzana y no había indicios de que quisiera ir al baño. Jisung se fijaba a cada rato los gestos de Minho. Hasta que de repente ocurrió lo que esperaba que sucediera. Minho se había hecho pipi en los pantalones. Técnicamente no fue su culpa, una atracción que sonó fuerte y pasó por encima de sus cabezas lo había asustado, causando el accidente.

–P-Papi~ - Minho nos sabía que hacer así que lo único que se le ocurrió fue correr hacia Jisung para que lo cargara. Jisung sin pensarlo mucho lo hizo.

–No pasa nada amor, ya nos vamos, ¿sí? Tranquilo bebe. No te sientas mal, fue un susto. No fue tu culpa.

Chan había tapado a Minho con su jersey y fue en busca de la mochila que traía Jisung. Este le había avisado de que algo así podría ocurrir. Así que fue directo.

Mientras Jisung se dirigía a la salida del parque, para luego irse al estacionamiento.

Cambiaria a Minho en el coche.

Ni loco lo cambiaria en un baño público, quien sabe cuántos gérmenes haya ahí.

Minho, bueno, el lloraba silenciosamente en el cuello de su papi. Se reprochaba el no haberle hecho caso a Jisung.

Al llegar a casa Jisung fue directamente con Minho al baño. Iba a bañarlo y luego le pondría su pijama favorito. Minho había dejado de llorar hace rato, pero la carita triste estaba ahí aún.

–Minho, amor. ¿Sabes que no fue tu culpa, cierto? – Dijo mientras lo desvestía.

–Pero si Minnie hubiera hecho caso a papi, esto n-no hubiera pasado. – Miro directamente a los ojos de su mayor. – Perdón papi, Minnie ha sido un niño malo hoy.

–No digas eso mi vida, eres el niño más bueno que conozco. Solo tuviste un mal día. Todos tienen un mal día de vez en cuando, ¿Okay?

Minho se sentía mejor, gracias a su papi.

Ya al acabar de bañar a Minho, Jisung lo sacó y le puso su bata. Lo alzo y lo llevó a la cama. Fue en busca de el pijama de Minho mientras a este lo dejaba con dibujitos en la televisión. Cuando lo encontró se dirijo a Minho para ponérselo. Luego le preparó un biberón. Una vez hecho subió a dárselo a Minho mientras lo arrullaba y le tarareaba una melodía. Minho a medida que tomaba el biberón sentía cada vez más sueño.

Varios minutos después Jisung había logrado dormir a Minho, era temprano aun, pero era lo mejor para el pequeño después de toda la energía que había gastado en el parque. Fue abajo a la sala y vio que Chan no estaba, se dirigió a la cocina y tampoco.

Justo cuando lo iba a llamar, él le llamó.

–Christopher Bang Chan, ¿dónde estás? Me asuste al no verte en ningún lado. - Dice Jisung nada más responder.

Perdón Sunggie, vine a comprar la cena. En cinco minutos estoy allá.

–Okay hyung, le espero. – Y en ese preciso momento Soulgi entro a la casa. – Mejor espéreme abajo, ya llego nonna. Hasta ahora hyung. – Dijo y le colgó.

–Hola Jisung, ¿y Minho?

–Ya duerme nonna, fuimos al parque hoy así que llegó cansado y se durmió temprano. Perdón no me puedo quedar más mi Channie me espera abajo, nos vemos mañana nonna. Adios~

Y así Jisung salió apresuradamente para ir con Chan que lo esperaba en la puerta del edificio. Jisung sabía lo que se le venía, Chan se iba a enojar un poquito con él.

–Ahora si enano, suelta la sopa. Quiero todo con detalles. De esta ya no te salvas. – Dijo Chan nada más entrar Jisung al coche.

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Hola chicxs, espero que hayan tenido un buen finde y que empiecen con ganas la semana entrante. Los quiero muchito, gracias por leer y votar. Besitos en la cola <3

Little Minho - MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora