|29|

455 45 2
                                    

–Minho, más suavecito la próxima ¿sí? – Dijo Chan regañando a Minho, quien al entrar corriendo a la habitación fue a abrazar a Jisung y con el impulso lo apretó bastante a lo cual este soltó un quejido sonoro.

–Perdón hyung, perdón papi. Es que estaba muy feliz de que ya estés despierto. – Dijo con ojitos de cachorrito y un pucherito.

–No pasa nada amor, no dolió tanto. -Dijo Jisung y Chan lo miró fulminante. – Solo un poquito.

–Sunggie, también hay afuera unas personas que te quieren ver. Estoy seguro que te gustará saber quiénes son. – Le miró expectante. El menor asintió. – Es tu familia ¿Los dejo pasar?

Jisung quedó impactado, pero sin duda asintió. Los extrañaba demasiado. BangChan salió y a los segundos volvió a entrar acompañado de tres personas. Estas entraron a paso lento y con cuidado. Parecían cachorros regañados. O eso pensó Jisung.

–Los extrañé mucho. – Dijo Jisung de repente. Haciendo que los tres fueran juntos a abrazarle. Los cuatro soltaron lagrimas silenciosas y los tres que entraron decían lo siento descoordinadamente.

–Hijo perdónanos por favor. Sabemos que te tratamos muy mal por tu sexualidad. Muy injustamente te abandonamos, pero estamos arrepentidos. – Dijo su mamá llorando a mares.

–No queremos perderte SungSung. – Dijo su padre llorando silenciosamente.

Jiwon, el hermano mayor de Jisung simplemente no sabía que decir. Se sentía tan avergonzado y decepcionado de sí mismo por cómo había tratado a su hermano, que no tenía cara para hablarle.

–Ven a abrazarme Jiwon, yo no puedo pararme todavía. – Dijo Jisung para alentar a su hermano. Sabía muy bien que se sentía muy culpable de sus actos. El nombrado fue a abrazarlo y lloro en su hombro, mientras le repetía una y otra vez sus disculpas.

Cabe recalcar que antes de todos esos abrazos Chan había agarrado a Minho en brazos, quien miraba pacientemente la escena para volver a abrazar a su papi.

–Bueno, ya basta de llantos. Quiero saber cuándo me dan el alta. Me han dicho muchas veces que la comida de hospital es horrorosa. – Dijo Jisung para liberar tensiones. A lo que todos rieron.

–He hablado con el doctor y dice que entre esta tarde y la noche podrás irte. Querían tenerte en observación en lo que despertabas para ver que todo estuviera bien. – Dijo Chan dejando a Minho a su lado.

Este enseguida se pegó a el cual garrapata.

–Ah cierto, no los presente. – Dijo este sentándose un poco mejor para que enteraran cómodamente los dos. – Mamá, papá, Jiwonnie, este es Minho. Es él bebe al que cuido, su hermana se llama Soulgi. Los quiero mucho a los dos, tanto como a Channie Hyung.

–Si cariño, Chan nos contó más o menos la situación que pasaste después de que... te echáramos de casa. -Dijo esto último bajando la mirada. Jisung le agarro la mano a su madre. – También hemos conocido a Soulgi y a tus otros dos amigos. Me alegra que te hayas rodeado de buenas personas en ese mal momento que te hicimos pasar. – Dijo esta triste, pero con una sonrisa.

–Si, a mí también me alegra mucho haberlos conocido y ser su amigo. Y sobre todo me alegra haber conocido a mi rayito de luz. – Dijo Jisung mirando a Minho. Este le dio un piquito. Por el cual todos menos Chan y Minho se sorprendieron.

Jisung también se sorprendió por que no esperaba que hiciera eso en ese momento. Miró inmediatamente a su familia y los vio con los ojos más abiertos de lo usual. Se puso nervioso al instante.

–Y-Yo, este. Digamos que Minho fuera y dentro de su space me quiere más que un cuidador y yo a él. – Anunció sonrojado hasta la punta de sus orejas.

–Tranquilo Sung, es nuevo para nosotros, pero lo aceptamos. Si tú eres feliz nosotros también lo seremos. – Dijo su mamá. Su padre y su hermano asintieron inmediatamente.

–Señor y señora Han, deberían ir a descansar. Han sido unos largos dos días y necesitan dormir, comer bien y darse un baño. Yo me quedare cuidando a Jisung hasta que le den el alta.

–Está bien, cariño, ¿volverás a casa o prefieres quedarte con Chan? Él dijo que podías seguir viviendo con él, pero si quieres puedes volver a casa cuando quieras. – Dijo ella esperanzada.

–Mamá, me gusta vivir con Chan. Me siento independiente y ya es hora de dejar el nido. Seguiré con Chan hyung, pero te prometo que iré a veros todos los días. – Dijo este agarrando la mano de su madre y su hermano. Ellos asintieron.

–Bueno entonces nos vamos, antes de que se me olvide, toma. Te traje comida, sabía que no querrías comer la comida del hospital. – Dijo su madre entregándole unos recipientes con comida. Le dejo un beso cálido en la cien y le miro a los ojos. – Gracias por perdonarnos. Nos vemos cariño. – Dijo despidiéndose de él. – Adiós Minho, fue un gusto conocerte. Adiós Chan, gracias por cuidar tan bien de mi hijo cuando te necesitó. Siempre estaremos agradecidos contigo por eso y por todo. – Dijo abrazándole.

–Adiós hijo, ven pronto a visitarnos. He extrañado mucho tus desayunos. Los de mamá no saben tan bien como los tuyos. – Dijo su padre, ganándose un golpe suave por parte de su esposa y una gran carcajada de su hijo mayor.

–Lo haré papá, te preparé tu favorito. – Dijo sonriéndole ampliamente.

–Adiós cariño, cualquier cosa llámanos. ¿De acuerdo? – Volvió a asentir y sonreír ampliamente.

–Adiós Sunggie. Por favor escríbeme cuando salgas de aquí. Te llevaré tus chucherías favoritas a casa de Hyung, tenemos que hacer una maratón con películas que sé que amarás. – Le dijo su hermano sonriendo aun con lágrimas en sus ojos.

Este lo abrazo por última vez y se fue detrás de sus padres.

Una vez ellos afuera, se giró hacia Chan y empezó a llorar, lágrimas de felicidad rodaban por sus regordetas mejillas.

–Chan hyung, tenía razón. Solo hacía falta darles un tiempo. – Dijo sonriendo y con Minho abrazándole suavemente.

–Te lo dije Sunggie, ellos te aman, solo tenían que asimilarlo bien.

–¡Yo también te amo mucho papi! – Dijo el menor dándole un besito en la mejilla.

Ambos mayores rieron y luego decidieron que pintar con el pequeño era una buena manera de distracción. Se pasaron horas y horas escuchando música y pintando, aunque a ratos se distraían porque Chan y Minho se ponían a hacerle un concierto privado a Jisung. Incluso vinieron un par de enfermeras a llamarles la atención por el ruido. Claramente no les importo mucho, para ellos era más importante que Jisung estuviera bien. 

Little Minho - MinsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora