Jamás faltes a una clase: La ultima perla

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Gracias a Anna hemos logrado sobrevivir, estuvimos hablando sobre lo que nos ocurrió cuando nos separamos, mis amigos no logran entender quién es la dueña de la voz que oyeron, yo sé que es Lucille y se los dije, ya que la última vez no me creyeron en esta ocasión trate de explicarme mejor y parece que logre convencerlos, después de todo ¿de qué otra forma podrían explicar la ayuda que recibieron?

Hemos decidido descansar un poco antes de ir por la ultima perla, aprovechamos para dormir un poco, tuve un sueño extraño...

Sueño

Me vi en un lugar completamente blanco, estaba rodeado por una gran niebla, entonces oigo una voz provenir de la nada.

¿?: Han llegado muy lejos

Una silueta va apareciendo y alguien sale de la niebla, era una mujer, ella estira sus alas haciendo que algunas plumas salgan volando.

Jorge: Así que por fin nos conocemos Lucille, creí que los arcángeles tenían más de dos alas

Lucille: Las tenemos, pero solo tengo permitido mostrarte dos de mis alas

Jorge: ¿Porque?

Lucille: Esto es suficiente para que puedas reconocerme, además los humanos no tienen claro como es nuestra apariencia ni cuantas alas tenemos los arcángeles, algunos piensan que tenemos dos, otros que tenemos cuatro, hay incluso quienes creen que tenemos doce, todo depende de la perspectiva de la persona

Jorge: ¿Y cuantas tienes realmente?

Lucille: Esa pregunta no te la pienso responder, lo descubrirás cuando mueras, y eso si por casualidad logras saberlo, no es conveniente que demasiada información llegue a la tierra, de otro modo podría ser perjudicial para ustedes los humanos

Jorge: (suspiro) Bueno, dime ¿para qué viniste?

Lucille: Supongo que esta consiente del apoyo que recibieron tus amigos de mi parte

Jorge: Mas o menos

Lucille: Tú también notaste algo ¿no es así?

Jorge: Si, me di cuenta que mi cuerpo dejo de sentir dolor en cierto momento

Lucille: Muy bien, igual que a ellos te concedí también una habilidad, si te concentras tu cuerpo no sentirá dolor alguno, pero... recuerda que aunque no sientas nada; el daño aún existe, si recibes un golpe mortal morirás, quizás de forma instantánea, cuando alguien siente dolor tiende a protegerse pero al quitarte esa capacidad podrías sufrir un daño catastrófico sin darte cuenta, por eso también te he imbuido con una sanación acelerada, no es mucho pero te ayudara a recuperarte de tus heridas y poder durar más tiempo, claro que eso no te servirá de nada si te arrancan un brazo, tenlo bien en claro

Jorge: Lo malo es que cuando deje de concentrarme todo el dolor que debí sentir me llegara de inmediato ¿no es así?

Lucille: Exacto, me alegra que lo entiendas

Jorge: Las cosas nunca pueden ser fáciles

Lucille: Créeme que eso tiene un motivo también

Jorge: Si, lo sé, pero con mi razonamiento humano no lo entenderé, eso es lo que seguramente dirás

Lucille: Adivinaste

Jorge: Muy bien, ¿hay algo más?

Lucille: Por el momento no, luego de nuestra conversación despertaras, espero entiendas que estas habilidades que les he concedido no son eternas ni mucho menos los vuelve omnipotentes, solo es una pequeña ayuda que se les está dando para que recuperen las perlas

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