Jamás faltes a una clase: La primera perla

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Ahí estaba, a pocos metros, lo único que nos separaba de la primera perla era una pared, pero no sabíamos cómo lograr entrar, después todo ya vimos que no estamos solos en este mundo, y si activamos una alarma terminaremos atrayendo a algunos monstruos a esos asesinos que rondan por la ciudad.

Jorge: No se me ocurre forma de entrar

David: Destrocemos la ventana, tomemos la perla y luego vámonos rápido, si actuamos con suficiente velocidad estaremos bien

Jorge: David, creo que olvidaste que traes una herida en la pierna que te impide correr

David: Ya no duele tanto, además no podemos quedarnos aquí por siempre

Jorge: Cierto (suspiro) vale, hagamos tu idea, prepárense porque...

Ana: (dentro de la joyería) Listo

Tanto David como yo nos quedamos con la boca abierta al ver que Ana había entrado a la joyería, no entendíamos como lo hizo, y cuando nos lo explico quedamos más sorprendidos, pero no por lo que creen.

David: (sorprendido) ¿Cómo lo hiciste?

Ana: Solo abrí la puerta

Jorge: (incrédulo) ¿Y ya?

Ana: Si

David: No puede ser tan fácil

Ana: Pues lo fue

Jorge: Bueno, no importa, solo tomemos la perla y vámonos

Nos acercamos a la vitrina, esta tenía la llave puesta, así que no nos costó trabajo abrirla, David tomo el collar y usando una tijera que yo traía en mi mochila lo corto y saco la perla fácilmente, el resto de las perlas se esparcieron rodando por el suelo. Esto había sido demasiado fácil, teóricamente hablando, al principio nos atacaron monstruos y asesinos lo que fue muy horrible, pero digo que fue fácil porque encontramos una perla en el primer lugar que buscamos, y la habíamos recuperado sin problemas, salimos de la joyería hacia la calle, David le dio la perla a Ana para que la colocara en su brazalete, todo parecía tranquilo hasta que oímos ruidos extraños, buscamos el origen del ruido, hasta que lo encontramos y nos quedamos en shock al descubrir que lo causaba, en una pared vimos al monstruo gato.

Cada uno de nosotros quedo en shock por ver a ese monstruo de nuevo parado como una araña en la pared viéndonos mientras gruñía, de la nada ese monstruo lanzo un liquido verde de la boca, por instinto lo esquivamos y gracias a Dios porque cuando ese extraño liquido toco el suelo, comenzó a derretirlo como si fuera acido.

Ese monstruo bajo de la pared y corrió hacia nosotros, nos dispersamos y el extraño animal fue tras Ana, ella trato de huir pero ese felino mutante le cortaba el paso fuera donde fuera, David y yo fuimos a ayudarla, David usando su hoz quiso herirlo pero el monstruo felino era muy rápido y de un zarpazo hizo volar la hoz de David y luego lo tiro al suelo causando que David quede inconsciente, yo tampoco tuve suerte, pues apenas intente golpearlo él me salto encima tirándome al suelo, y después fue tras Ana de nuevo.

Ese monstruo la arrincono contra la pared y trato de darle un zarpazo, pero ella atravesó su cuchillo en el camino de su garra y la pata del animal se incrusto con el cuchillo, desafortunadamente al monstruo no pareció importarle, el trataba de morderla y Ana solo podía usar un brazo para mantener sus dientes a raya. Sin duda esta criatura estaba obsesionada con matar a Ana, pero ¿porque? Después de todo ni a David ni a mí nos hizo ningún daño grave, solo nos quito de su camino, ¿Qué tenía este monstruo contra Ana? La respuesta me llego casi de inmediato, me levante y me acerque a Ana que seguía tratando de mantener a raya los dientes de esa bestia.

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