Capítulo 31 (Final)

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Capítulo extra largo

Jungkook no asimilaba lo que el doctor le estaba diciendo. Él continuaba llamando a EunJung, intentando despertarla.

_Deja... Deja de bromear así- Dijo, alterado- Oye, de-despierta o me enojaré de verdad. ¡Despierta!

El sanador se vio obligado a sostener al recién nacido cuando los movimientos de Jeon se tornaron bruscos. Sacudió el cuerpo sin vida de la joven.

_Despierta... ¡He dicho que despiertes, maldita sea!

Su voz se desgarró en ese grito, y las criadas se vieron obligadas a interferir. JinSook estaba arrodillada junto a la cama, cubriéndose el rostro, y escondiendo los sollozos que no paraban de salir.

_Dígale que despierte, no se quede así, ¡despiértela, usted es doctor!- Exclamó el amo.

El rostro de Jungkook estaba enrojeciendo. Estaba rabioso, sin terminar de comprender el simple y doloroso concepto de la muerte de su mujer. Cargó a EunJung, negando, dándole repetidos besos en todo el rostro.

_Escucha, tiene que haber... Tiene que haber una forma de... Tú no me puedes dejar, no nos puedes dejar... Te... Te necesitamos. Despierta, por favor... Despierta...

Los ojos del joven se llenaron de lágrimas, que no se esforzó en esconder. Abrazó entonces el cuerpo, con fuerza, queriendo tenerla de vuelta. Quería que abriera los ojos y le dijera que estaba bromeando.

Sin embargo, eso no pasó. Jeon cayó de rodillas al suelo, aún sujetando a la inerte joven, y echándose a llorar contra su cuello, sin consuelo.

_¡¿No vas a ver siquiera a tu hijo?!- Gritó, desesperado, provocando también el fino llanto de su bebé, que ahora estaba asustado, entre los brazos del doctor. Jeon se acercó, y lo sostuvo con cuidado.

JinSook, las criadas, y el médico, supieron que era momento de salir. Aunque no pensaban alejarse de la puerta. Sabían que el amo no era estable mentalmente.

Jungkook sostenía con delicadeza al niño, acercándolo a EunJung, y recostándolo a su lado.

_Tienes que cuidar... de nuestro pequeño copo de nieve... Mira, él también necesita que despiertes...- Dijo, sin pensar siquiera en retener las lágrimas.

El bebé no parecía inmutarse ahora, inocentemente ajeno a la tragedia a su alrededor. Ajeno a que a tan sólo unos segundos de nacer, se volvió huérfano de madre. Jungkook le miraba con lástima. Él sabía lo que significaba crecer sin una madre, y no le deseaba eso a nadie. Mucho menos a su pequeño.

Jeon pensó que era demasiado para soportar. Él había comenzado a vivir después de conocer a aquella joven, que ahora yacía muerta frente a él. Cargó al recién nacido.

_Taeyang- Le habló bajito- Papá va a cuidar de ti...- Susurraba, arrullándolo.

Él se dio cuenta entonces, de que aquella débil y diminuta criatura entre sus brazos, acababa de convertirse en el centro de su vida.

La forma de su rostro era una perfecta mezcla entre EunJung y él. Y su abundante cabello blanco, le hacía recordar lo especial que era. Era la imagen de la mujer que amaba, y que seguiría amando toda la vida. Su único anclaje a la realidad.

Only My Toy «Jeon Jung Kook»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora