capitulo 46

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Alejandro y yo estamos en la sala de su casa, decidimos poner este caso fuera de la firma, algo que solo él y yo conocemos, en todos lados hay papeles, noticias que nunca fueron publicadas, informes detallados de personas, tenemos pensado mañana entrevistar a cada una de las personas, buscamos vínculos que tengan que ver con Adrien.

Al parecer Adrien no era tan estúpido sabia ocultar evidencias, demasiado bien, cada que leía un nuevo documento sentía que se burlaba en nuestras caras y no podía aceptar eso, me levanto frustrada, Alejandro levanta su mirada a mí.

-       ¿A dónde vas?- me pregunta.

-       Esto es una liga de criminales y algo me dice que lo que hay atrás de esto será demasiado para nosotros.- nos señaló a los dos.

-        Lo sé, siempre lo he sospechado, nunca puse mi vista en eso, pero ya vi muchas personas afectada, no lo permitiré más, acabare esto.

-       Necesitaremos más ayuda, ¿lo sabes?- niega con la cabeza.

-       No puedo meter a más personas en esto.

-       Tengo un amigo fiscal que nos podrá ayudar.

-       Si empezamos a meter a la fiscalía en esto, todo se convertirá en un caso a voces, los pondremos sobre aviso.

-       Está bien, ¿tú que tienes?

-       Al parecer si es una organización criminal grande- bufo con obviedad volviéndome a sentar.

-       Usan el mismo algoritmo para dar supuestos prestamos, para al final no dar nada y si quitar, esa misma empresa que según es prestamista, lava dinero, conseguí distintas cuentas y con solo verlo te das cuenta que es un lavado de dinero, nadie está al frente, las huellas son de personas inexistentes, para lograr eso tiene que ser algo demasiado grande, es para que ya tuvieran a todos tras de ellos, se todo lo que pasa en esta ciudad y nunca había escuchado de algo así, usan lo mismo con fines diferentes y si hay lavado de dinero, me espero más que eso, tal vez drogas.- me quedo muda al pensar que por una línea hotelera tengamos que descubrir todo esto, en que mierda me metí, hubiera estudiado para maestra o no me hubiera acostado con mi jefe.

-       ¿y ahora qué sigue?

-       Organiza todo para las entrevistas de mañana

-       Más bien interrogatorio.

-       Lo que sea, solo hazlo.

-       ¿en la firma?

-       No, los cite en este hotel- me entrega una tarjeta-  la mayoría de las personas son indigentes, asegúrate que les consigan ropa, comida y un baño.- me alejo para hacer un par de llamadas.

[...]

Estábamos en un salón que habíamos reservado en un hotel, me encontraba en una mesa preparando todo en la computadora, Alejandro estaba viendo en la ventana, ha estado muy pensativo, supongo que está formulando algún plan.

Había montado un grupo de personas para que prepararan a las víctimas, a un costado de mi había una cámara y una grabadora para guardar toda evidencia que en un futuro juicio nos serviría, Alejandro había insistido poner guardias de seguridad alrededor ya que esto se trataba de algo grande que en cualquier momento se nos podría salir de las manos.

Entra la primera víctima, me levanto de mi lugar recibiéndola, Alejandro se sienta donde yo estaba y me quedo parada atrás de él, empieza con la presentación de la víctima, para luego empezar a relatar cómo fueron todos los hechos.

Lazos Rojos (en edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora