Destiel One Shot Collection (Vol. II)

2- Hasta que el Dolor Desaparezca

Día 2: Hurt Comfort

Jack estaba muerto. Jessica, la Parca, los había llevado de regreso al búnker. Ella no dijo una palabra y volvió a desaparecer. Y ahora estaban allí… esperando algún nuevo plan…
Sam era como un alma desesperada, buscando en cada libro una solución. No quería pensar en la muerte de Jack. Era demasiado doloroso, así era como Sam lo manejaba, tratando de encontrar una salida a este nuevo Apocalipsis.

Y Cas estaba… Cas estaba devastado. Dean nunca lo había visto así. Se recordó a sí mismo en aquella  noche horrible, cuando Castiel había muerto. Cuando su todo se había ido, creyó, para siempre. Sí, Castiel era él, esa noche.

¿Cómo podía acercarse a él? Estaban enojados el uno con el otro,bueno… Dean ya no estaba molesto, pero se comportaba como un idiota. Gritándole cosas ridículas que no sentía. Maldita sea ... esas palabras hirientes ... Dean Winchester, eres realmente un idiota.

Cas se estaba yendo ahora… estaba caminando hacia su habitación. Dean le dio una mirada rápida a su hermano, pero Sam estaba demasiado concentrado en mantener su mente ocupada con la investigación.
Dean respiró hondo y se animó a seguir a su mejor amigo. Necesitaba mostrarle que estaba allí. Incluso si era un idiota, un hijo de puta estreñido ... estaba allí. ¡Usa tus palabras esta vez, Dean Winchester!

Dean llamó a la puerta. Y escuchó a Cas decir:

-No quiero hablar ahora, Dean.

Malditos ángeles ... siempre lo saben todo. Dean tragó, y mordiéndose el labio inferior, se aventuró a hablar:

-Yo solo ... solo necesitaba decirte algo ...

-No estoy de humor para tus necesidades, Dean.

¡Maldita sea, Winchester! ¡Palabras equivocadas!

-Ahm ...- Dean comenzó de nuevo, hablar a través de una puerta no era tan fácil en absoluto:-Escucha ... amigo (¡Mierda!) Cas ... Cas, yo ...- cerró los ojos, buscando dentro de él esas palabras:-Por favor ... yo ... lo siento ...- Finalmente murmuró y la puerta se abrió.

Era Cas, con lágrimas en los ojos, Dean sintió que le dolía el corazón.

-¿Qué es eso, Dean?- preguntó el ángel, y los verdes de Dean cayeron a sus labios rosados, era inevitable no hacer eso cuando tenía a Cas tan cerca. No pudo evitarlo. Lo amaba tanto ...

-Déjame entrar- pidió el cazador, sin siquiera pensarlo. Ni siquiera dar más explicaciones, porque:-No soy bueno con las palabras ... pero tal vez pueda mostrártelo- Dean terminó diciendo aún contemplando esos deliciosos labios.

Cas lo dejó entrar y cerró la puerta detrás de ellos. No entendía lo que Dean quería de él. Necesitaba estar solo, acababa de perder a su hijo, pero lo dejó entrar de todos modos… Dean siempre obtenía lo que quería de él. Tenía ese poder sobre Castiel.

-Estoy de duelo, Dean- dijo Cas, porque pensó que Dean no lo entendía.

Pero el cazador lo miró con ojos tristes, estaba demasiado cerca de nuevo.

-Lo sé, Cas… solo quería decirte que lo siento. Por todo. Por Jack… por mis palabras…-Dean miró sus manos, tan cerca el uno del otro, y decidió que era hora de hacer el movimiento. Sostuvo las manos de Castiel y los ojos del ángel ahora estaban bien abiertos. Mirándolo con asombro.

-Dean, ¿qué ...?- preguntó Cas, pero Dean le ofreció la más hermosa de las miradas. Cas estaba en silencio.

-Te amo, Cas- Las palabras llegaron como un torbellino a su boca y las bendijo. Porque no lo pensó demasiado. No esperó, besó a su ángel, con dulzura. Cas cerró los ojos lentamente y le devolvió el beso. Incluso si el dolor todavía estaba allí ... era más fácil de manejar ahora, porque Dean lo estaba llenando con ese beso.

Te besaré Cas, todas las noches y todas las mañanas, hasta que el dolor desaparezca.