28- Un Beso en la Vuelta al Mundo

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Día 28: Familia

- Dije que no, Jack, ese no es un buen lugar, créeme, lo sé - dijo Dean, tomando su café en la cocina.
Jack estaba tratando de convencerlo de que fuera al parque de atracciones cuando llegaron Sam y Cas.

- ¿No se supone que sea un viaje habitual para las familias? Y nosotros somos una familia - volvió a atacar Jack.

Dean entrecerró los ojos mientras tomaba un sorbo de café, y luego lo señaló con su taza roja y dijo:

- No uses esa palabra en mi contra, chico.

- ¿Que esta pasando?- preguntó Sam, y Jack inmediatamente explicó la situación.

Dean sabía que tendría un par de ojos de regaño mirándolo en poco tiempo.

- Quiero ir, en familia, al parque de atracciones - dijo el niño.

- Oh, es una gran idea - sonrió Sam.

- No, Sammy, no - interrumpió Dean, colocando su taza sobre la mesa: - Sabes que esos lugares están llenos de niños y ... disfraces y juegos cursis.

- ¿Y eso qué? - preguntó Sammy.

Dean lo miró confundido.

Entonces Cas dijo:

- Vamos, Dean - y Dean no quería mirarlo ... pero lo hizo. Y ahí  estaba Castiel, mirándolo con esos ojos profundos, azules y dominantes ... tan jodidamente hermosos.

Dean tosió y bajó su rostro:

- O ... Kay ...- respondió, casi balbuceando

Comenzaron el viaje familiar, y cuando llegaron al parque se dieron cuenta de que era fabuloso, lleno de alegría y… juegos cursis.

- Te lo dije - murmuró Dean, acercándose a Cas.

El ángel lo miró desconcertado:

- No sé de qué estás hablando - Castiel parpadeó: - ¿Quieres decir que la gente viene aquí en una especie de cortejo sexual y romántico? - quiso saber el ángel, inclinando la cabeza de una manera hermosa.

Dean tragó y asintió en silencio. Qué ángel tan impresionante era ... y ahora su boca estaba a punto de moverse por sí misma:

- Te mostraré uno si quieres -  dijo.

Cas parpadeó de nuevo, esta vez con nerviosismo, pero sus labios también se movieron por sí mismos:

- Está bien - respondió.

Cuando Sam y Jack estaban lejos de ellos, Dean llevó a Castiel a la Vuelta al Mundo ... ya estaba oscureciendo y la vista era espectacular.

- ¿Te gusta aquí? - preguntó Dean, quien había estado todo el tiempo contemplando al ángel.

- Sí me gusta. Mucho, es hermoso - observó Castiel: - pero no entiendo por qué es tan cursi.

Dean sonrió con picardía, y acercándose a él sin previo aviso, lo besó dulcemente en los labios:

- Porque lo es -  explicó.

Cas se sonrojó, pero luego le sonrió también, y Dean besó a su ángel una vez más.

Destiel One Shot Collection (Vol. II) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora