Sentado en el sillón, con la cara apoyada en sus brazos se encontraba Seonghwa. A su lado, Wooyoung y San. No hablaban mucho entre ellos, solo miraban al segundo piso, cómo si así sucediera lo anhelado.
-¿No ha salido? -preguntó Mingi al acercarse a ellos.
Un "No" acompañado de una negación con la cabeza, le indicó la respuesta al castaño. Sentandose a los pies de San, comenzó a mirar la misma puerta que los demás. Uno a uno, los miembros faltantes hicieron acto de presencia, todos ante la misma duda existente.
Los siempre alegres dormitorios se encontraban ahora en completo silencio. La luz de la sala era la unica iluminación presente, y el estado de animo se sentía demasiado pesado. 7 pares de ojos miraban aquel cuarto en especial, esperando que se abriera y que de él saliera la persona que querían ver. No recibían respuesta.
-No puede ser -exclamó el mayor de todos con un suspiro. Los menores se acercaron más a el, y lo abrazaron. En ese momento, nadie tenía más energía para hacer nada, solo esperar.
Desde que volvieron de la compañía luego del problema con el productor, el lider subió las escaleras y le pidió a los miembros que le dieran un tiempo a solas antes de entrar a su habitación. De eso, habían pasado 4 horas. Ya era tarde en la noche, pero nadie lograba dormir. Aun que le habían ofrecido un lugar en sus respectivos cuartos al mayor de todos, este no acepto, decidiendose a quedarse en la sala. Así que ahora, los menores estaban acomodados en el piso entre mantas y Seonghwa en el sillón. No sabían exactamente en que momento el peligris logró dormirse. El día fue muy pesado para todos, y en parte se alegraban de que él lograra conciliar el sueño. Quisieron taparlo por el fresco, pero se detuvieron al escuchar una puerta abrirse, luego unos pasos y de la escalera comenzaba a bajar una cabellera azul. Con los ojos inchados, el labio morado, y cara cansada, un Hongjoong entraba a la sala. Nadie dijo nada, solo le sonrieron levemente.
-¿Hace cuánto tiempo están acá? -pregunto con voz ronca el lider.
-Nosotros hace unas pocas horas. Seonghwa hyung desde que vinimos -se animó a responder Yunho.
Y fue ahí cuando Joong logró ver con claridad el cuerpo acostado en aquel sillón. Con pasos lentos se acercó a él, lo miró y suspiró. Tomandolo en brazos con cuidado para no despertarlo, se dió la vuelta dispuesto a subir de nuevo -Vayan a dormir. Mañana tenemos que trabajar -dijo y siguió los escalones.
Los menores veían a ambos de sus hyung's entrar a su cuarto compartido y, tratando de animarse entre sí, hicieron como el peliazul les indicó.
Hongjoong acomodó a Seonghwa en su propia cama (por que sí, aún no habían comprado una para ambos), lo arropó y se acostó a su lado. Tomandolo por la cintura, se acercó a su cuerpo y comenzó a respirar el leve perfume que aún duraba en su cuello, hasta que se durmió profundamente.
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La luz se filtraba un poco por las ventanas, y la sueve respiración del contrario en su pecho le parecían el mejor saludo de "Buenos días". Hace media hora que Seonghwa logró despertarse, y no sabía cómo había llegado a la cama del lider, ni cómo se encontraba este abrazado a su cintura con el rostro recostado en su pecho. Por supuesto que no lo despertó, ni siquiera lo intentó. Más bien, se encargó de acariciarle el cabello, mientras con su otra mano le sobaba la espalda. El peliazul era digno de admiración: sus ojos formaban una linea al estar cerrados, mientras sus largas pestañas se posaban en sus mejillas; su cabello despeinado se lucía en el azul lavanda que comenzaba a aparecer entre los mechones y su afilada nariz terminaba en sus rosados labios. Pero la mancha violacea que se notaba en el labio inferior le daba el tinte triste a la hermosa imagen. La mejilla roja del día anterior, ahora solo tenía un razguño.
Por otro lado, el peligris no sabía exactamente que había hecho Hongjoong las más de 4 horas que estuvo encerrado, pero el recipiente de pastillas en la mesa de luz le daban algún indicio.-¿Seonghwa, estás despierto? -preguntó una voz grave.
-Si Joong. Y ¿tú?
-También. ¿Te duele algo? Ayer te dormiste en ese viejo sillón -dijo mientras se separaba del mayor. Y este se sintió vacio de repente.
-No me duele nada. Pero ¿dormiste bien?
-Sí -fue lo único que recibió como respuesta, antes de que el peliazul se metiera al baño.
El mayor se levantó y, luego de cambiarse de ropa, le avisó a su novio que iría a preparar el desayuno. Pero al bajar las escaleras pudo sentir el aroma a comida y al entrar a la cocina, vió que los menores ya tenían listo todo.
-¿Cocinaron todo esto? -preguntó sosprendido.
-Hola hyung! Si, nosotros lo hicimos -respondió Jongho.
-Y es totalmente comestible -aseguró Mingi.
-Sí, eso sí. San lo probó y, mira, no murió ni esta en el piso llorando de dolor -dijo Yeonsang, teniendo al de hoyuelos molestandolo con abrazos después.
-¿Hongjoong-hyung ya baja? -consultó Yunho.
Todos miraban a Seonghwa, esperando la respuesta -Sí, ya viene - contestó con una pequeña sonrisa.
Los menores estaban terminando de poner la mesa cuando los pasos del lider se dieron a conocer -¡Buenos días! -saludó este.
-Buen día hyung -exclamó San ante el sorprendente buen humor del recién llegado.
-Huele delicioso ¿Quién cocinó?
-Entre todos lo preparon -respondió Seonghwa.
-Se vé increible ¿que esperamos para comer? -preguntó al sentarse en la mesa, siendo imitado por los demás miembros.
El desayuno se desarrolló entre charlas y risas, bastante relajado gracias a que les habían dado la mañana libre. Al finalizar, los maknaes lavaban los platos por perder el piedra-papel-tijera, San y Mingi ordenaban las compras de la mañana en los estantes; Seonghwa Y Yeonsang acomodaban la sala, y Yunho y Hongjoong fueron a comprar helado. Es por eso que los miembros que se habían quedado, esperaban ansiosos por aquel frio postre.
-¡¡Chicos, Hongjoong-hyung usó su targeta!! -contaba un animado Yunho al entrar a la sala.
-Waa ¡elegiste los más caros Yunho! -le decía Wooyoung.
-¿Y Hongjoong? -preguntaba Seonghwa al no ven entrar al peliazul.
-Vení detrás de mí -respondió el de mayor altura al mirar tras sus pasos en busca del lider.
-Yunho agarró los más caros les cuento -venía diciendo el peliazul.
-Aquí estas hyung. Creimos que te habías perdido -le dijo San.
-¿Por qué me perdería San-a?
-Por que eres chiquito -le respondió, e intentó tomar su rostro, recibiendo una mirada asesina de su parte.
-Dame el de chocolate -pidió Jongho.
-Ni para mí ni para Joong dejen el de menta con chocolate o matamos a alguién -exigió Seonghwa.
Mientras se armaba el debate por el chocomint, el lider aprovechaba para revisar las cartas y avisos que había agarrado de la entrada. Pero al verlo, los miembros se miraron entre sí: SE HABIAN OLVIDADO DEL CORREO.
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•La ayuda de un amigo• Honghwa/Seongjoong Ateez
FanfictionHongjoong está cansado, a decir verdad, muy cansado. Y ahí está Seonghwa, su mejor amigo, para liberarlo del estrés... aun que quizas no de la forma tradicional de solo amigos... *Hongjoong top/ Seonghwa bottom *Menciones leves del Woosan, Yungi y J...